EL PAíS
› EL PERONISMO ACELERA EL DEBATE POR LAS INTERNAS
Contando los votos de la UCR
› Por Eduardo Tagliaferro
Anteayer, un importante dirigente del peronismo en Diputados dijo a este diario: “Necesitamos 30 votos radicales por la afirmativa para sancionar la obligatoriedad de internas abiertas y simultáneas”. Ayer, al cierre de esta edición, el bloque radical comenzó a analizar qué posición llevar al recinto. Aunque originalmente acompañaron con su firma el dictamen de la comisión parlamentaria, los radicales comenzaron a revisar sus anteriores definiciones, al punto de no garantizarles a los legisladores del PJ esos 30 votos necesarios para que la iniciativa se convierta en ley.
“En principio sí”, respondió a este diario Mario Capello cuando se le preguntó si su bloque acompañaría al PJ al momento de votar el proyecto de internas abiertas. A pesar de que el titular de la bancada, Horacio Pernasetti, se manifestó de acuerdo en votar con el peronismo, no son pocas las voces que comenzaron a cuestionar esta definición.
Originalmente el proyecto fue impulsado por el radical Federico Storani cuando éste pasó por el Ministerio del Interior. En su momento, la Cámara baja observó que la medida contemplaría únicamente los cargos de presidente y vice de la Nación. El proyecto volvió del Senado con algunas modificaciones. Allí se incorporó a los gobernadores y legisladores nacionales, entre los segmentos que deberían figurar en las internas abiertas. Sin embargo, el tema no mereció el reparo de la UCR cuando fue discutido en la comisión.
Las dudas comenzaron a crecer la semana pasada. Sostienen que con los bajos montos destinados al financiamiento de los partidos políticos a éstos se les hace virtualmente imposible afrontar las internas abiertas “sin salir a buscar una fuente de financiamiento”.
“Es una irracionalidad absoluta”, dicen de la obligatoriedad de convocar a comicios internos en los casos en que hubiese lista única. No dudan en definir que los partidos políticos que tengan un solo candidato van a ser exceptuados en la norma. También reparan en que la ley “va a dificultar las alianzas provinciales entre hombres de partidos nacionales, como suelen hacer peronistas y radicales”.
Para sancionar la ley, el oficialismo necesita la mitad más uno del total del cuerpo, es decir 129 votos por la afirmativa. Sin el radicalismo eso resulta imposible. Ratificando su esencia, ayer los radicales dudaban. Los partidos de izquierda, el ARI y los provinciales se manifestaron en contra. “Decir que en Estados Unidos las elecciones primarias son abiertas es un invento argentino”, señaló el santafesino Alberto Natale. A esta altura quedan pocas dudas de que la insistencia del PJ, entre otras motivaciones, pretende contener su interna y comprometer a todas sus líneas en comicios y, de esta manera, evitar la diáspora tan temida.
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