Cuando el presidente Kirchner les pide a “los argentinos” que no compren carne si no bajan los precios. Cuando el Gobierno les dice a los consumidores que “cuiden el bolsillo” y que denuncien a las empresas que no cumplen con los acuerdos de precios. Cuando Montoya apela a los contribuyentes a que paguen sus impuestos. La mayoría de las veces se dirigen a “ellas”. Según una encuesta de la consultora Equis, que circula por despachos oficiales, en el 56 por ciento de los hogares argentinos son las mujeres quienes “administran la plata del hogar”. En un 25 por ciento de los casos es la pareja. Y sólo en un 19 por ciento de los hogares son los hombres los encargados de manejar el presupuesto familiar. Cuando menores son los ingresos del hogar, más fuerte es la presencia femenina a la hora de administrar el dinero.

El relevamiento fue concluido en marzo pasado, y se realizó sobre 400 casos en Capital y Gran Buenos Aires, con representación de todos los estratos socioeconómicos. Fue encargado por el Gobierno, preocupado por activar las campañas de defensa del consumidor para disciplinar los precios. La pregunta central de la encuesta fue directa, sin ambigüedad: ¿quién es el encargado de administrar la plata del hogar?

Las respuestas confirman la idea popular de que “los mangos los maneja mi esposa”. En más de la mitad de los hogares, la administración del dinero corre por cuenta de la mujer. “La mujer maneja las cuentas del hogar, asigna o distribuye los recursos: cuánto va para los hijos, cuánto para transporte, para los gastos de salud y educación, para vestimenta, para comida, para esparcimiento”, dice Artemio López, titular de Equis. “También decide, en base a un presupuesto dado, en qué momento pagar la luz, el teléfono o los impuestos”, agrega.

Esta tendencia se profundiza a medida que se desciende en el nivel socioeconómico. “En los hogares de bajos ingresos, aumenta la impronta femenina en la administración del presupuesto. Entre otras cosas, porque la jefatura de hogar femenina es un fenómeno más marcado en la pobreza”, explica López.

Se supone, obviamente, que la administración del presupuesto familiar se vincula a las decisiones cotidianas, y que frente a las grandes decisiones, como vender la casa o comprar un auto, ahí sí la palabra final es mayoritariamente compartida.

Ahora bien, ¿quiénes realizan el aporte de ingresos al hogar? En el 71,1 por ciento “sólo el hombre o principalmente el hombre”. En el 20,9 por ciento “la mujer o principalmente la mujer”. Y en el 8 por ciento restante “ambos por igual”. Conclusión: en la mayoría de los casos, el que aporta el dinero sigue siendo el hombre, pero el que lo maneja es la mujer. En Gobierno ya tomaron nota de los resultados de la encuesta de Equis. “La campaña antiinflación debe orientarse predominantemente hacia las mujeres”, fue la recomendación de la consultora.