Los precios promedio en los supermercados aumentaron durante el mes de marzo 1,33 por ciento con respecto al mes anterior y redondearon una suba del 3 por ciento en el primer trimestre del año (en comparación a los precios de diciembre). Comparando los índices de precios en este tipo de establecimientos de marzo de este año y los del mismo mes del año pasado, la tasa de inflación anual rondaría el 8,9 por ciento, menor a la registrada en los cuatro meses anteriores.

Dichos datos surgen de la encuesta mensual del Indec sobre ventas en supermercados, que releva 1449 bocas de expendio distribuidas en todo el territorio nacional. A partir de los datos recogidos, además de la estadística sobre niveles de ventas a precios constantes y volumen facturado, el Indec elabora un índice de precios implícitos que describiría la evolución promedio del precio de los productos comercializados en estos centros de venta.

Conforme a los resultados de esta encuesta, se estaría verificando una desaceleración de la inflación a partir de diciembre. La tasa de incremento anual de precios en supermercados había alcanzado en noviembre al 10,9 por ciento, la más alta desde mediados de 2003. En diciembre cedió dos décimas, ya en enero de este año redondeaba el 10 por ciento y en febrero bajó otro escalón, al 9,7 por ciento.

Este proceso coincide con la puesta en vigencia de los acuerdos de precios con las principales cadenas comerciales, que buscaban atenuar los aumentos o retrotraerlos. El plan de rebajas se aplicó sobre un listado cerrado de productos, pero que abarcaban a toda la gama de alimentos básicos y elementos de higiene y tocador de uso más común.

Las ventas a precios constantes del mes de marzo en supermercados resultaron 0,9 por ciento inferiores a las de febrero y 5,6 por ciento mayores a las de marzo del año pasado. Medidas a precios corrientes –por volumen de facturación–, las ventas alcanzaron a 1927,1 millones de pesos, lo cual representa una suba de 14,2 por ciento con respecto al mismo mes del año anterior. Tomando en conjunto al primer trimestre, el aumento de las ventas corrientes resulta del 15,1 por ciento.

Si se miden las ventas a precios corrientes en los diferentes rubros del primer bimestre –los datos discriminados del Indec llegan hasta febrero–, se observan fuertes diferencias en la evaluación con respecto al año pasado. Los electrónicos y artículos para el hogar son los que, por montos de ventas, más se incrementaron con relación al año pasado, probablemente por un efecto combinado de aumentos de precios y de cantidades. La suba interanual registrada en este rubro es del 26,8 por ciento. Le siguen lácteos, con el 22,3 por ciento, e indumentaria, calzado y textiles para el hogar, con el 21,1 por ciento.

En los escalones más bajos de aumentos a precios corrientes, por efecto combinado de precios y cantidades, se encuentran los rubros de productos unitariamente más baratos, como son almacén (4,8 por ciento de alza en las ventas facturadas en un año) y panadería (8,8 por ciento).