A 24 horas de una nueva jornada de protesta, el Gobierno y los piqueteros endurecieron posiciones y cruzaron advertencias sobre lo que pueda ocurrir mañana, a medida que los manifestantes comiencen a concentrarse en los accesos a la Capital Federal para denunciar “el manejo partidario de los planes de empleo” y reclamar alimentos. El jefe de Gabinete, Alfredo Atanasof, reiteró que existe la decisión de utilizar “todos los mecanismos para hacer cumplir la ley” y evitar que la Capital quede aislada, ante lo cual los piqueteros ratificaron la medida y dijeron que mantendrán los cortes sobre los puentes de ingreso a la ciudad.
La protesta de mañana promete hacerse sentir ya que, después de varios meses de movilizarse por separado, cuatro organizaciones lograron acordar una medida conjunta. Saldrá a la calle el Movimiento de Jubilados y Desocupados de Raúl Castells, el Bloque Nacional (que agrupa a las líneas piqueteras del Partido Obrero y el Partido Comunista), la Coordinadora Aníbal Verón y Barrios de Pie (CTA).
En la Capital hay anunciados piquetes en cinco puntos: sobre los puentes Pueyrredón, Alsina, La Noria, el acceso de Liniers y General Paz y Panamericana. Si bien la jornada de lucha tendrá carácter nacional, la atención estará puesta sobre lo que pasará en esos ingresos.
Ayer, Atanasof calificó la decisión de cortar dichos puntos como de “acto irracional”. Dijo además no saber “qué fines persiguen los dirigentes” y consideró que su metodología no hace más que “contribuir al caos”.
Las organizaciones convocantes salieron a responderle. “Queremos recordarle al Gobierno que lo que están diciendo ya se lo escuchamos decir a Enrique Mathov y a Rubén Santos en diciembre, y hoy están todos procesados”, señaló Raúl Castells desde la casa de Lomas de Zamora, donde cumple prisión domiciliaria.
Jorge Ceballos, de Barrios de Pie, dijo que el Gobierno debería “cumplir primero con la Constitución, que es la primera ley y contempla el derecho a los alimentos, la vida y el trabajo”, antes que descalificar a los que cortan rutas, mientras que Néstor Pitrola (Polo Obrero) anticipó que habrá “cortes en los puentes de ingreso hasta que accedan a dialogar con nosotros, depende de ellos cuánto tiempo esté interrumpido el tránsito”.
Dentro del Bloque, al igual que en la Coordinadora Aníbal Verón, como medida de prevención algunos barrios están evaluando no llevar chicos a los piquetes. “Creemos que el Gobierno trata de meter miedo porque no puede dar respuesta a la necesidad”, dijo a Página/12 Florencia, del MTD de Lanús; “nosotros ratificamos la protesta y decidimos tomar algunas medidas de seguridad. Vamos a estar más atentos”.
Los puntos de reclamo son cinco. El pago a todos los beneficiarios del plan Jefes y Jefas de Hogar es considerado como un tema central por los piqueteros, que plantean que miles de solicitantes no han podido cobrarlo. Los números varían de organización a organización (Castells habla de 17 mil dentro de su Movimiento, la Aníbal Verón reclama por 480, el Bloque Nacional sostiene que están en esa situación “la mitad de sus solicitantes”). Los otros temas de reclamo son un aumento general de salarios, alimentos para los comedores, medicamentos para los hospitales públicos y la libertad de Castells.