El ex presidente Fernando de la Rúa será indagado nuevamente mañana por el juez federal Daniel Rafecas, quien luego de la audiencia estará en condiciones de resolver si lo procesa por el presunto pago de coimas en el Senado para la aprobación de la reforma laboral. La medida fue solicitada por el abogado del ex mandatario. De la Rúa ya había declarado el pasado 5 de junio durante casi doce horas, en una maratónica indagatoria en la que negó que se hayan pagado sobornos para aprobar la flexibilización laboral. Ayer fue indagado en la causa el ex senador radical José Genoud. Como era previsible, el ex funcionario negó todos los cargos y acusó al juez de haber politizado la investigación.

El ex senador llegó a los Tribunales poco después de las once de la mañana y fue indagado hasta las cuatro de la tarde. Al retirarse, auguró que la causa “va a fracasar”. “Estoy convencido de que esto va a terminar eximiéndome de responsabilidad”, sostuvo.

Genoud está procesado por cohecho junto a otros ocho ex senadores peronistas y radicales y funcionarios de la Alianza. Era el jefe del bloque en la Cámara alta cuando fue aprobada la ley y quedó complicado en el caso por la confesión de Mario Pontaquarto. Según el ex secretario parlamentario, el pago de las coimas se acordó en el despacho presidencial de la Casa Rosada, en una reunión en la que participaron De la Rúa, Genoud, los senadores Augusto Alasino y Alberto Tell y el ex ministro de Trabajo Alberto Flamarique. En aquel encuentro le habrían encomendado a Genoud que “arreglara” la cuestión con el titular de la SIDE, Fernando de Santibañes. Pontaquarto dijo que Genoud le dio instrucciones para retirar de la SIDE cinco millones de pesos en dos maletines y una caja de cartón, destinados a los sobornos. De acuerdo con Pontaquarto, Genoud cobró cerca de 700 mil dólares de comisión. La causa debe ser enviada a juicio oral antes de fin de año, ya que en caso contrario prescribirá.