¿Qué tienen en común Mauricio Macri, Roberto Lavagna, Juan Carlos Blumberg, Ricardo López Murphy y Jorge Sobisch? En los últimos tres días, todos estuvieron en encuentros con los legisladores del Movimiento Federal –provinciales aliados en PRO–, quienes ya los imaginan dentro de un frente en 2007. Y los cinco dirigentes, con las veleidades del caso, se mostraron proclives a una coalición. “Después de Misiones, le podemos ganar al oficialismo”, comentó a Página/12 uno de los legisladores que se la pasó de café en café y de cena en cena con los referentes opositores.

“No queremos decir que nos une el espanto a Kirchner, pero el que no se juega en esto es funcional al matrimonio presidencial”, resumieron los dirigentes sus muchos contactos. Los provinciales iniciaron su ronda de consulta con Macri, a quien vieron el martes a las 18. Fueron de la partida, el demoprogresista Alberto Natale, los diputados de PRO Esteban Jerez, Omar de Marchi, Luis Galvarisi, el renovador de Salta Ricardo Gómez Diez y el legislador Martín Borrelli. “Mauricio quiere juntarse con Lavagna antes de fin de año para dar los primeros pasos”, indicaron.

De la sede del macrismo, los dirigentes se trasladaron a la parrilla Estilo Campo, de Puerto Madero, donde los esperaba el ex ministro de Economía Roberto Lavagna, flanqueado por los diputados de El General Eduardo Camaño, Jorge Sarghini y el ex legislador Alberto Coto. Entre las achuras, regadas con buen vino tinto, se coló una pregunta incómoda.

–¿Le va a permitir que Alfonsín le ponga bolilla negra a Macri? Porque nosotros, en ese caso, no podemos coincidir –preguntó Borrelli.

“Ni Kirchner ni Alfonsín van a determinar mis tiempos. Sobre eso, opino yo”, respondió Lavagna. A pesar de sus interlocutores, Lavagna dejó en claro que busca un “espacio centroprogresista”. “El pálpito es que antes de fin de año se lanza”, arriesgaron desde el Movimiento Federal.

El miércoles a las 15 estuvieron con López Murphy. El Bulldog está en ascuas desde que se enteró de las reuniones de macristas con lavagnistas a sus espaldas. “Y no se preocupó en ocultarlo”, acotaron los dirigentes. El líder de Recrear no se privó de recordar el pasado de algunos de los peronistas que acompañan a Lavagna. Sin embargo, no cerró la puerta a una coalición. “Reconoció que si no hay oposición fuerte a Kirchner en 2007, las instituciones desaparecen”, relataron los provinciales.

Por la tarde, estuvieron con Blumberg, quien todavía no definió si será candidato de PRO a gobernador bonaerense. “Lo vimos con vocación, con voluntad y diciendo que en algún lado va a participar. Aunque no arriesga dónde”, se esperanzaron en el Movimiento Federal. “A lo mejor, en febrero lanza su candidatura”, timbearon. El último en la lista fue el gobernador de Neuquén. “El único que nos atendió a pan y agua. Solo nos dio café”, se quejaron los legisladores, que también intentarán juntarse con los radicales antes del 15 de diciembre, aunque la abrupta salida de Roberto Iglesias de la conducción del partido retrasó el encuentro. También van a hacer la prueba de reunirse con la líder del ARI, Elisa Carrió. “Aunque puede ser que nos haga pito catalán”, se resignaron.