Un ex efectivo de la Policía Bonaerense quedó detenido ayer al ser reconocido por la abuela de una beba desaparecida durante la dictadura militar como uno de los represores que participó de un operativo en el que la interrogaron en su propio domicilio en diciembre de 1976. Se trata de Santiago Antonini, arrestado por orden de la Cámara Federal de La Plata, a la que había concurrido a declarar en el denominado Juicio por la Verdad. También fue arrestado, pero por falso testimonio, un policía en actividad, Enri-que Nilsson.
Antonini fue detenido bajo el cargo de “privación ilegal de la libertad”. La Cámara Federal platense lo había convocado a declarar en la causa en la que se trata de determinar el destino de más de dos mil desaparecidos, pero su situación procesal cambió al ser reconocido por María Isabel Mariani como integrante de una patota de la dictadura.
Según explicó la abuela, Antonini integró el grupo que irrumpió en su domicilio de la calle 44 entre 20 y 21 de La Plata, pocas semanas después de que se llevaran a su nieta, Clara Anahí Mariani Teruggi, quien aún permanece desaparecida. “El hombre que acaba de declarar estaba ahí, con un rifle o una escopeta. Lo recuerdo porque todos eran corpulentos, pero él era más bajo”, aseguró Mariani en referencia al ex policía.
Mariani precisó también que “después del ataque a la casa de mi hijo, fuerzas policiales y militares entraron a mi vivienda y destruyeron y robaron todo”. Además, que el grupo de tareas la retuvo en su domicilio, la interrogó y revisó todo.
Al escuchar el relato, los jueces recurrieron a fotos del legajo de Antonini para que confirmara su reconocimiento. “Es él”, afirmó entonces Mariani con seguridad. Sin más trámite, el tribunal ordenó el arresto de Antonini, quien fue retirado esposado de la sala de audiencia.
Nilsson, detenido por falso testimonio por el mismo caso, trabaja en la división de Delitos Complejos y Narcocriminalidad de Mar del Plata.