Angel Maza acusó a su vice de querer “tomar por asalto” el gobierno y aseguró que hay elementos para justificar la intervención federal. Beder Herrera lo denunció penalmente.
La Rioja está que arde, pero no porque sea verano, sino porque la tensión derivada de la interna peronista va en aumento y podría alcanzar mañana su máximo pico, si los legisladores que responden al vice Luis Beder Herrera eliminan la reelección indefinida y avanzan también con alguno de los pedidos de juicio político al gobernador Angel Maza. Con ese telón de fondo, el mandatario acusó a su vice de querer “tomar por asalto” el gobierno provincial, advirtió que si es suspendido se producirá “una situación de ingobernabilidad que va a ser de lamentar” y afirmó que hay elementos que ameritan la intervención federal del distrito. Beder Herrera lo denunció penalmente por el presunto desvío de fondos de la coparticipación y aseguró que promueve un “piquete en las casas” de los legisladores para impedir el funcionamiento de la Legislatura.
Mientras Maza y Beder Herrera se acusan recíprocamente, sus seguidores se preparan para marchar mañana a la Legislatura. No será la primera vez que los legisladores alineados con el vice tratarán de poner un freno a la continuidad del gobernador en el poder: ya a fines del año pasado intentaron hacerlo y en aquella oportunidad hubo enfrentamientos entre partidarios del mandatario y su vice.
Las declaraciones públicas de Maza y Beder Herrera dan cuenta de que los ánimos en La Rioja están por demás caldeados. “Lo que quieren hacer es suspenderme en las funciones de gobernador, dar un golpe de Estado institucional, quedarse con el gobierno”, denunció el gobernador y afirmó que su vice “viene cumpliendo acciones conspirativas desde hace más de 20 años”. “Si suspenden, se va a dar una situación de ingobernabilidad que va a ser de lamentar”, advirtió también el mandatario en referencia a la posibilidad de que prospere alguno de los cinco juicios políticos en su contra, a los que consideró “totalmente amañados”.
Maza estudia adelantar las elecciones de gobernador para evitar la eliminación de la reelección indefinida y tiene al apoyo de dieciséis de los dieciocho intendentes riojanos, quienes amenazaron con renunciar si prosperan los juicios políticos en su contra. Ayer obtuvo, además, el respaldo del ministro de Salud, Ginés González García, quien destacó los logros del gobierno riojano y los atribuyó a que “tiene buenos equipos y continuidad”. El gobernador evaluó que “se están dando causales” para la intervención federal y hoy podría reunirse con funcionarios nacionales en Buenos Aires para analizar la situación provincial.
“La reelección indefinida crea corrupción”, declaró Beder Herrera y dijo tener “pruebas” de que Maza desvía fondos de la coparticipación. Además, acusó al mandatario de promover un “piquete en las casas” por parte de sus seguidores para “impedir que los legisladores vayan” a la sesión de mañana.
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