Luego de una gira por Estados Unidos y de participar en la reunión cumbre del Frente Federal, el gobernador de Salta, Juan Carlos Romero, se lanzó ayer como candidato para competir en la interna del PJ. “Tengo experiencia en la gestión empresarial, legislativa y de gobierno en mi provincia”, se elogió el salteño, quien asimismo prometió que “el eje” de su gobierno “será la creación de empleo y la generación de actividades productivas”.
Quizá para distanciarse de su imagen de representante del pensamiento liberal más ortodoxo, Romero se permitió una leve crítica a Carlos Menem. Así, cuando le preguntaron por la responsabilidad del riojano en la crisis actual, respondió: “Durante el segundo mandato de ese gobierno se confió demasiado en la tecnocracia economicista. Los capitales no eran eternos y se produjo un crecimiento de la desocupación, que fue el primer shock que recibimos los argentinos en el ‘95 y el ‘96.”
Romero se refirió con ambigüedad a la posibilidad de acompañar al riojano como candidato a vicepresidente. “Estoy concentrado y dedicado a exponer una idea para ser candidato a presidente. Eso no está en mis cálculos. No es un tema de análisis por el momento y es prematuro para cualquiera”, dijo. Finalmente, el precandidato descartó de plano la dolarización, coincidiendo de esa forma con los delegados del FMI: “No es conveniente ni creo que sea un plan de gobierno”, aseguró.