Germán Kammerath tiene los días contados en la intendencia de la ciudad de Córdoba si prospera la recolección de 100 mil firmas y un posterior referéndum vinculante para destituirlo. Sería el primer funcionario electo en el país removido del cargo por esta vía. El proceso se inició después de que la Junta Electoral Municipal hiciera lugar al pedido de un abogado local por mal desempeño de funciones del intendente, quien no logró llevar a buen puerto ningún proyecto de su gestión. Ayer se conoció públicamente que el abogado de Kammerath será el cordobés Oscar Roger, el mismo que defendiera a Carlos Menem en el proceso por el contrabando de armas y con la misma expectativa: apelar hasta la Corte Suprema de Justicia, donde los amigos puedan ayudar. Paralelamente, Kammerath considera con sus íntimos hasta la posibilidad de llamar anticipadamente a elecciones, con tal de no irse echado por la ciudadanía.
El 24 de julio pasado se abrió el proceso de revocatoria al intendente Kammerath. La Junta Electoral hizo lugar al pedido del abogado socialista Carlos Bellotti, quien, entre otros fundamentos, argumentó que el funcionario no cumplió los deberes de funcionario comprometidos con los cordobeses. La Carta Orgánica Municipal prevé que si 100 mil ciudadanos, el diez por ciento del padrón en la elección que consagró a Kammerath, apoyan con su firma la solicitud de Bellotti, el futuro del intendente debe ser decidido en un referéndum obligatorio y vinculante. Si se produce la revocatoria, el viceintendente Adán Fernández Limia completará el mandato. No son pocos los que leen en este proceso la mano del delasotismo, enemistado abiertamente con la Ucedé en los últimos meses y enfrentado a su aliado en la interna presidencial, Carlos Menem.
Kammerath apeló la decisión y la jueza electoral municipal, Cecilia Mathieu, rechazó el recurso. Oscar Roger comenzó a trabajar hace varios días para defender a Kammerath, aunque su designación se hizo pública recién ayer. El abogado sostuvo que no es posible la destitución por esta vía porque se está tramitando un juicio político contra el intendente en el Concejo Deliberante. La Justicia electoral descartó el argumento, porque ese proceso no prosperó, gracias a la intransigencia oficialista y le aclaró al intendente que sólo podrá presentar nuevas impugnaciones cuando se hayan recolectado las firmas, tal como lo establece la Carta Orgánica. La idea de Roger es recurrir por vía extraordinaria ante la Corte Suprema de Justicia de la Nación.