Mencionada en el ya célebre audio de la empresa sueca, la provincia negó todo. Asociada con Techint, Skanska hizo un acueducto y líneas de alta tensión. Y envío de valijas.
› Por Werner Pertot
El caso Skanska llegó a La Pampa y ni las vaquitas quedaron en calma. La grabación del ex gerente Javier Azcárate incluyó un tramo en el que mencionó “valijas” que iban hacia esa provincia, donde Skanska participó con Techint de la construcción del acueducto de río Colorado. En el escándalo quedó envuelto un funcionario nacional: Raúl Víctor Rodríguez, subsecretario de Obras Públicas. Rodríguez acompañó al gobernador menemista Rubén Marín en ese cargo en la provincia, cuando se denunciaron irregularidades en la construcción del acueducto. Ayer negó haber recibido sobornos, mientras que Marín evitó opinar. Un diputado opositor presentó un pedido de informes al ministro de Obras Públicas, Julio Bargero, para que explique si existieron coimas. Todo en el medio de una interna del PJ por quién será el candidato a gobernador en octubre.
El fragmento de la conversación entre Azcárate y el auditor interno de Skanska, Claudio Corizzo, que desató la polémica fue el siguiente:
C.: –¿Este fue el único caso en que la guita volvió y la tocaron o tienen más casos?
A.: –La Pampa.
C.: –¡Qué quilombo! Bueno, ¿qué pasó con La Pampa? ¿Participó Techint?
A.: –Sí. (...)
C.: –Y acá la línea, la valijita.
A.: –La valijita la consolidábamos en Techint o la consolidábamos nosotros o la venían a buscar de La Pampa o se la llevábamos a La Pampa. (...) Es lo mismo dársela a un tipo en un café o dársela a Techint para que se la dé a un tipo en un café. Nos turnábamos para que no nos peguen un tiro.
Skanska y Techint se presentaron para terminar un acueducto que había tenido un inicio polémico: en 1998 se lo adjudicó al empresario Victorio Gualtieri, recordado por su cercanía al ex gobernador Eduardo Duhalde. La obra se financió con un aporte del gobierno nacional que aprobó Carlos Menem, de 183 millones de pesos-dólares. En la preadjudicación, se excluyeron otras cuatro constructoras. Sin embargo, Marín terminó por rescindirle el contrato a Gualtieri en 2000, por incumplir varios de los puntos del convenio. En particular, la oposición denunció que se cambió el pliego original, en beneficio de Gualtieri, y que la adjudicataria no hizo las pruebas hidráulicas que se exigían originalmente.
En 2001, se hicieron cargo de la obra Skanska y Techint, que conformaron una Unión Transitoria de Empresas (UTE). Por terminar la ampliación hasta Santa Rosa, cobraron más de 70 millones de pesos-dólares. La compañía sueca también firmó convenios con la provincia por una línea de alta tensión y una planta de rebaje. En 2005, hicieron otro acuerdo para administrar el acueducto. En la negociación intervinieron tres de los imputados en la causa Skanska: Rubén Zerega, Eduardo Varni y Azcárate, quien menciona “la valijita” en el audio. Hubo una auditoría interna de Skanska sobre La Pampa, que ya fue requerida por la Justicia.
A raíz de que se conoció el audio de Skanska, el diputado del FRAP (que integran el Frepaso, el PS y la UCR), Mario Cayre, presentó un pedido de informes al actual ministro de Obras Públicas en el que sostiene que “la corrupción no finalizó con Gualtieri, sino que también corrieron valijas entre la empresa y funcionarios de la provincia”. Cayre ya había presentado una denuncia penal por el tramo de la obra de Gualtieri.
A la denuncia se sumó una orden del actual gobernador Carlos Verna de que se investigue el caso. Verna enfrentará a Marín en una interna del PJ en julio de este año y el caso Skanska no hizo más que echar nafta al fuego. El fiscal de Estado José Alejandro Vanini –mano derecha de Verna– presentó una denuncia por las irregularidades en el tramo que construyó Gualtieri ante la Fiscalía de Investigaciones Administrativas, a cargo de Enrique Romero Oneto, cercano al ex gobernador Marín. Como formó parte de la comisión encargada de auditar el acueducto, se excusó de intervenir.
En tanto, Cayre cargó las tintas sobre Rodríguez, que actualmente es el segundo del secretario de Obras Públicas, José López. “Rodríguez fue el que manejó la obra desde su inicio, en 1997, con la licitación a Gualtieri, hasta el 2003. Al ser ministro de Obras Públicas era el responsable directo”, dijo. Rodríguez le respondió desde una radio local: “Hemos tenido errores, pero esta situación que se plantea no existió. Y si existió, yo no lo sé”, dijo. Por su parte, Marín fue consultado por los periodistas locales y dijo que no tenía nada para decir sobre el tema.
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