Vie 15.06.2007

EL PAíS

Las Malvinas fueron “una victoria colonial”, pero “inaceptable”

En un acto para inaugurar un centro deportivo en Tres de Febrero, Kirchner hizo un ardiente discurso fuera de programa. Aclaró que la recuperación de las islas será por la vía pacífica.

“Quiero decirle a la señora Thatcher que nos podrá haber ganado una batalla porque pertenece a una potencia poderosa, pero que nunca nos va a ganar la razón y la justicia de que las Malvinas son argentinas.” Con el tono épico que suele dar a sus discursos, el Presidente aprovechó un acto en el municipio de Tres de Febrero para contestarle a la ex premier británica. Anteayer, Margaret Thatcher había dicho que los británicos debían extraer “esperanzas y fuerzas de la victoria de las Malvinas” y que “toda la nación debería continuar celebrando el triunfo”. La respuesta de Kirchner fue la más fuerte que se le haya escuchado hasta ahora en relación con Malvinas. “Fue una victoria colonial, inaceptable ante los ojos del mundo. Se masacraron a chicos y a oficiales argentinos que pelearon por nuestra soberanía”, aseguró desde el palco mientras la multitud gritaba “Argentina / Argentina”. El Presidente aclaró que “las islas volverán a ser argentinas por la paz”.

Como en los primeros tiempos de su mandato, Kirchner aprovechó una tribuna local, organizada para algo tan corriente como inaugurar un centro deportivo, para referirse a cuestiones internacionales. Anteayer, con motivo de cumplirse 25 años de la rendición de las fuerzas argentinas en 1982, Thatcher había dedicado un mensaje radial a los kelpers que viven en las islas. La ex premier, entre otras cosas, dijo que la guerra en el archipiélago fue “una lucha nacional magnífica”. El Presidente le contestó con una reivindicación de los argentinos que lucharon en las islas. “En nombre de todos los argentinos, quiero rendirle homenaje a la vida, a la lucha y al coraje que tuvieron los malvineros que pelearon por la soberanía argentina hasta el último minuto y hasta el último segundo”, aseguró.

Cuando comenzó a hablar sobre Malvinas, y luego de nombrar a “la señora Thatcher”, desde el público comenzó a sonar un cantito con resonancias futboleras: “Y ya lo ve / y ya lo ve / el que no salta / es un inglés”. La reivindicación presidencial de los combatientes en Malvinas continuó con un mensaje de fuerte tono nacional. “Hay que estar orgullosos de ser argentinos. Debemos construir definitivamente un país con inclusión social, con argentinidad, con paz y bandera. Tenemos que revalorizar los valores del ser nacional. La Argentina se hizo con el coraje de San Martín, de Mariano Moreno, de Hipólito Yrigoyen, de Juan Perón y la llama inmortal de la justicia y la equidad”, dijo Kirchner.

El discurso del Presidente sobre las Malvinas retomó la misma línea que había esgrimido en la apertura de las sesiones ordinarias ante la Asamblea Legislativa. Allí había reafirmado “la más firme voluntad del diálogo” de su gobierno “para resolver la disputa de la soberanía”. También había prometido que “Argentina no cedería en su legítima aspiración” de recuperar la soberanía de las islas. Con un tono muy similar y la misma línea de reafirmar la soberanía, pero resaltando la opción por la vía pacífica, el canciller Jorge Taiana habló hace diez días ante la Asamblea General de las Organización de Estados Americanos (OEA). Allí volvió a hablar de la “voluntad de diálogo” de la Argentina. Su discurso fue respaldado con aplausos por la absoluta mayoría de los Estados que forman parte de la OEA (todos los países americanos salvo Cuba).

La reivindicación de la soberanía sobre las islas Malvinas fue siempre una de las banderas personales de Kirchner. Por eso sorprendió que, al cumplirse 25 años del desembarco del 2 de abril, faltara al acto que se organizó en Ushuaia y enviara en su lugar al vice Daniel Scioli.

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