El Gobierno firmó el decreto para pagar tres cuotas de 110 pesos que se debían desde el 2001. Conflictos en el interior.
En medio de varios frentes de conflictos docentes en distintos lugares del país, el Gobierno anunció ayer el pago de una vieja deuda pendiente por el pago del incentivo. Se trata de tres cuotas de 110 pesos por cargo adeudadas desde los gobiernos de Fernando de la Rúa y Eduardo Duhalde. El presidente Néstor Kirchner presidió el acto de la firma, pero los reclamos se sucedieron puertas afuera de la Casa de Gobierno durante todo el día. Hubo marchas y manifestaciones multitudinarias en Mendoza y protestas de los bonaerense en la ciudad de Buenos Aires y antorchas en el Chaco.
A la mañana, columnas del Frente Gremial Docente de la provincia de Buenos Aires avanzaron hacia la Capital. Se concentraron frente al Congreso para marchar hasta la Casa de la Provincia de Buenos Aires.
En simultáneo, se realizaba el anuncio desde la Casa Rosada.
“Era un compromiso que el Presidente había asumido hace tiempo –dijo Filmus después, en una conferencia de prensa–, y que ahora lo estamos haciendo efectivo.”
Kirchner firmó una resolución que les permitirá cobrar a los maestros y profesores de todo el país tres pagos extras de 110 pesos por cada cargo, por una deuda de otros gobiernos. Las cuotas que se pagarán en septiembre, octubre y noviembre con valores actualizados implicarán un aumento de 345 millones de pesos en el presupuesto de Educación.
Del acto participaron referentes de las conducciones gremiales nacionales: Ctera, Sadop, UDA, AMET y CEA con el contrafondo de varios conflictos que hacen ruido en el interior del país. Tal vez por esa razón, Hugo Yasky desde la conducción de Ctera intentó mostrarse cauteloso. Aunque señaló el acuerdo como un “paso muy positivo”, recordó que “nos permitirá saldar y empalmar con la discusión del salario para el año 2008” y adjudicó el mérito a “la lucha histórica de los 1003 días de la Carpa Blanca”.
En tanto, los maestros enrolados en el Frente Gremial bonaerense –Suteba y FEB (Federación de Educadores Bonaerenses)– el Congreso elevar de 570 a 1200 pesos el salario básico –actualmente el inicial está en 1040 pesos–. Ellos hicieron un paro el miércoles y no descartan nuevas medidas con demandas que incluyen a la provincia.
“Los gremialistas que siempre me pidieran que reclame lo que la provincia tiene de menos –dijo Felipe Solá– ante el gobierno nacional -cosa que hice muchas veces- deben aceptar que reciben ahora un pago de incentivo docente adicional por ese pedido.”
En Mendoza, el Sindicato Unido Trabajadores de la Educación (SUTE) confirmó que el paro de actividades que comenzó ayer tuvo un “alto acatamiento”. En la tierra de Angel Cobos, candidato a vicepresidente por el kirchnerismo, unos ocho mil docentes marcharon hasta el centro de la ciudad con una bandera de 400 metros y pidiendo pasar de 1040 pesos y a un mínimo de 2300. Los docentes de las escuelas privadas que adhirieron al paro concurrieron a trabajar y permanecerán en estado de asamblea hasta el lunes próximo y evaluar. La Dirección General de Escuelas decidió descontar los días.
En tanto, los maestros de los llamados sindicatos “duros” del Chaco pararon ayer y volverán a parar durante el día de hoy, también en reclamo de mejores salarios. El gobierno local propuso allí una tregua hasta el próximo 3 de setiembre y un cambio en el nomenclador docente, pero fue rechazado. La Asociación, la Unión y el Sindicato de Trabajadores de la Educación del Chaco (Atech, UTRE y Sitech) dice que beneficia a maestros primarios pero excluye a profesores secundarios.
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