EL PAíS
› LA IGLESIA POR LA LIBERTAD DE DIRIGENTES NEUQUINOS
“Un pronto gesto de libertad”
Por Elio Brat
Desde Neuquén
La Iglesia neuquina tomó una dura posición en defensa de los dirigentes gremiales estatales detenidos la semana pasada en disturbios en el Instituto de Seguridad Social de la provincia. “Lo más grave en Neuquén no es ni comienza con la agresión al titular del instituto, Gerardo Hettinger”, dice el documento emitido ayer. “Entendemos ese hecho como la consecuencia y respuesta a la provocación y tomada de pelo permanente, al hartazgo y bronca acumulada en muchísimo tiempo.” La institución pidió la liberación de los dirigentes Julio Durval Fuentes, Horacio Fernández, Hilda Locatti y Miguel Peralta, que hoy cumplen una semana de detención.
Sin vueltas y reivindicando la memoria y el accionar de quien fuera el histórico obispo de esta provincia, Jaime Francisco De Nevares, los católicos neuquinos transmitieron “a los compañeros detenidos, a los que aun no lo han sido y a sus organizaciones nuestra solidaridad y también gratitud porque a pesar de la desigualdad de condiciones en la lucha contra la injusticia, mantienen los pilares que Don Jaime nos pidió al despedirse de nosotros: ‘No se achiquen, tengan coraje’”. Se espera para hoy una marcha masiva por la inmediata libertad de los cuatro dirigentes.
La posición de la iglesia patagónica es sustentada por Jorge Muñoz Villagrán, responsable del Equipo Pastoral de Migraciones del obispado local. “Responder con la violencia a la violencia no es bueno para nadie y menos aun para nosotros, los que optamos por ubicarnos al lado del Pueblo”, dice el documento, “el verdadero ‘saqueado’, humillado y burlado día a día, por el poder financiero y estos gobiernos títeres y ‘empleados’ de ellos, traidores de su pueblo”.
El mismo día en que el juez interviniente en la causa, Alfredo Velazco Copello, tomó declaración a dos de los funcionarios que fueron golpeados en el edificio de la obra social provincial, la Iglesia se dirigió a los responsables de hacer justicia: “Pedimos a los miembros del Poder Judicial de la provincia y también en el ámbito federal, que aprovechen la crítica situación que padece la mayoría del pueblo –no los jueces– para intentar acercarse a la Justicia y recuperar la necesaria credibilidad y legitimidad popular. Por lo que pedimos un pronto gesto de libertad y desprocesamiento a los detenidos y perseguidos”.