Después de haberse disparado con munición gruesa, el gobierno porteño y el sindicato de los trabajadores municipales celebraron una tregua: el gremio suspendió el paro de 72 horas que debía comenzar hoy y fue convocado por la Subsecretaría de Trabajo de la ciudad a una reunión a agenda abierta para hoy, a partir de las 10. Allí se discutirá sobre los 2400 cesanteados, pero también sobre otros 18.000 empleados en condiciones precarias cuyos contratos el macrismo pretende revisar. La tregua se acordó en una reunión que mantuvieron el jefe de Gobierno, Mauricio Macri, y el titular del Sutecba, Amadeo Genta, en la que se acordó realizar un censo de todo el personal municipal, tanto de planta permanente como los contratos de locación de servicios. Desde el Ejecutivo, sin embargo, se insiste en que no se revisarán las cesantías ya dispuestas. En tanto, los municipales afiliados a ATE ratificaron un paro de 24 horas para mañana, ya que no fueron convocados por el gobierno. Mientras, el interventor a la obra social de los municipales, Jorge Rey, pudo por fin ingresar a la sede de la Obsba, pero la conducción sindical no lo reconoció como tal, a la espera de que la Justicia resuelva un recurso de amparo presentado por el gremio. Entre los argumentos que esgrimen los abogados figura un dato curioso: el último día hábil anterior a la intervención, Macri había designado a los miembros del directorio de la Obsba en representación del gobierno. Ese cambio abrupto de opinión le da pie al gremio para sostener que la intervención fue en represalia al paro dispuesto por Sutecba.

El Sutecba había iniciado un plan de lucha contra la cesantía de 2300 empleados, que consistió en dos paros parciales el miércoles y jueves último, y un paro con movilización, el viernes pasado. Ese día, el jefe de la CGT, Hugo Moyano, y el titular del gremio, Amadeo Genta, exhortaron al jefe de Gobierno a dialogar. Luego el gremio anunció un paro de 72 horas que debía comenzar hoy.

Durante el fin de semana hubo contactos informales, pero ayer la primera señal pública la dio Mauricio Macri, en una conferencia de prensa, por la mañana, donde envió un mensaje al gremio: “Los problemas se resuelven dialogando y no con medidas que toman como rehenes a los vecinos y que ocasionan trastornos en la convivencia”.

Poco después se produjo el contacto entre el jefe de Gobierno y el titular del gremio, fuera del Palacio Municipal. En el gobierno dicen que fue a instancias de Genta. En el sindicato aseguran que Macri le dijo allí al veterano dirigente sindical: “Hablá con (el ministro de Hacienda, Néstor) Grindetti”. Poco después, el gremio anunció la “suspensión de la medida de fuerza”. Y Macri dispuso que la Subsecretaría de Trabajo convoque al gremio a una negociación “a agenda abierta”, según coincidieron voceros sindicales y del macrismo.

“El paro fue suspendido, no levantado. La decisión se tomó después de la reunión que Amadeo Genta mantuvo con Macri”, dijo el secretario de prensa del sindicato, Enrique Pistoletti. Pistoletti afirmó que hoy a las 10 delegados paritarios del gobierno porteño y del sindicato analizarán en la sede laboral local la situación generada por la no renovación de unos 2400 contratos en la administración pública. La cartera laboral porteña, que está a cargo de Jorge Ginzo, está dentro de la órbita del Ministerio de Desarrollo Económico.

Voceros del gremio dijeron a Página/12 que en la reunión se abordarán otros temas como “la necesidad de hacer un censo para determinar las tareas que cumplen los trabajadores, que se puede hacer en menos de 60 días”. “Con la acusación de ñoquis y de contratos políticos, han sembrado un manto de sospecha sobre todos los trabajadores”, se quejó el dirigente sindical. Y agregó que también se llevarán a la mesa de negociación otros reclamos, como “el blanqueo de los trabajadores que cobran parte de su sueldo en negro y la indemnización a unos 2000 trabajadores en edad de jubilarse que cobran la mitad de su salario con sumas no remunerativas”.

–¿Puede ocurrir que obtengan alguno de estos nuevos reclamos y que el tema de los 2400 cesanteados quede firme? –preguntó este diario.

–No creo. Nosotros vamos a insistir con las reincorporaciones –ratificó el dirigente.

En la agenda también estará la situación de otros 18.000 trabajadores, cuyos contratos fueron renovados el 1º de enero, pero por sólo tres meses. “Se trata en su mayoría de contratos de entre 900 y 1200 pesos mensuales”, aseguró a este diario un dirigente gremial. También queremos que se revisen los contratos de locación de servicios, que llegan a 4000 pesos mensuales”, insistió.

Según distintas fuentes consultadas por este diario, la lista de los trabajadores que finalmente resultaron cesanteados no había sido la elaborada originalmente por los directores de las áreas, a pedido del jefe de Gabinete, Horacio Rodríguez Larreta. “Los directores empezaron a recibir llamadas de algunos padrinos políticos de algunos contratados y resolvieron reemplazarlos por otros. Fue por eso que muchos de los cesanteados son personas que realmente cumplían funciones y tenían antigüedad”, relató una fuente a este diario.

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