Famoso. Para envidia de ministros y legisladores argentinos, el único funcionario mencionado por el presidente Rafael Correa en su discurso fue el secretario de Deportes, Claudio Morresi. Al enumerar los convenios que se habían firmado y llegar al de deportes, Correa hizo un alto y dijo: “Tenemos aquí a Claudio Morresi, que fue campeón mundial con River. ¿No es así Claudio? El funcionario argentino asintió (integró el equipo que ganó la Copa Intercontinental en 1985 frente a Steaua de Bucarest) y Correa siguió: “Nuestro ministro de Deportes quizá fue campeón en el club de su barrio”. Ante las risas generales, remató: “Igual te queremos, Raúl”. El ministro Raúl Carrión Fiallos sonreía colorado.

- - -

Protesta. Cuando Cristina Fernández de Kirchner llegó al Palacio Carondelet para entrevistarse con Correa había una pequeña multitud, en su mayoría curiosos o simples transeúntes que detenían su paso, que esperaba para verla de cerca. Pero cuando salió la escenografía había cambiado. Se topó con una colorida protesta de ecologistas que denunciaba que la explotación minera estaba contaminando las aguas, con bombos, redoblantes y trompetas.

- - -

Altura. El médico de CFK tuvo que trabajar como pocas veces en los viajes presidenciales y no para atender a la Presidenta precisamente. Fueron varios los funcionarios y periodistas que sintieron el efecto de los 2830 metros de altura de Quito y lo agotaron pidiéndole remedios para el dolor de cabeza, las náuseas o descomposturas varias.

- - -

Vestigios. Todos los integrantes de la delegación argentina no dejaban de maravillarse con la Iglesia de la Compañía de Jesús, donde la Presidenta recibió las llaves de la ciudad. Con estilo barroco, destellan los llamados panes de oro, que es madera forrada en oro que cubren todas las paredes. Para construirla, generaciones de aborígenes trabajaron 160 años (desde 1605 hasta 1765). Todos los emblemas de los jesuitas estaban allí. Pero el ministro de Trabajo, Carlos Tomada, se percató de un detalle: la cúpula estaba coronada con un sol inca. Tanto trabajo, pero dejaron la firma.

- - -

Libro. El embajador argentino en Ecuador, Carlos Piñeiro Iñíguez, es un conocido intelectual de lo que comúnmente se llama el pensamiento nacional. Escribió ensayos sobre Latinoamérica, el Mercosur y el peronismo, Raúl Prebisch y Hernández Arregui, entre muchos trabajos. Ahora acaba de publicar una investigación sobre personas y libros que moldearon las de Perón. Se titula Perón. La formación de su pensamiento.