Clarín y La Nación son socios del negocio sojero en Expoagro, donde cada año se mueven centenares de millones de dólares. Constituyen así otro actor oculto en el conflicto. Desde la década pasada, La Nación organizaba cada año Expochacra. Clarín empezó este siglo con Feriagro. El año pasado unieron esfuerzos y comparten beneficios. Es una muestra agropecuaria anual en las zonas agrícolas, para que diferentes empresas expongan bienes, insumos y servicios. Ocupa 100 hectáreas, entre stands y estacionamiento, y otras 500 para las demostraciones de siembra y cultivo con maquinarias. Ante los visitantes se prueban cientos de máquinas e implementos agrícolas de última generación. Este año asistieron 202.498 personas y hubo 526 expositores. Las entradas cuestan 20 pesos. Los restaurantes, confiterías y servicios se entregan en concesión. Los stands al aire libre cuestan hasta 59.000 pesos más impuestos, menos que los cubiertos, donde el más pequeño, de 4x3 metros cuesta 8.000. Cada página de color en el catálogo se paga 8.700 pesos. Las tarifas de las transmisiones radiales van de 600 hasta 3000 pesos y las carpas de conferencias se alquilan a mil pesos por cuarenta minutos. También se vende la colocación de logotipos en la ropa del staff, la cartelería interna o en el estacionamiento, en los transportes internos de la muestra y en los pórticos en las demostraciones. Bunge Fertilizantes fue el sponsor oficial de Feriagro 2006 y de Expoagro 2007. Monsanto tuvo este año un stand de 5.500 m2, el doble que el de AAPRESID, en el que tres mil personas participaron en un “tour tecnológico” sobre innovaciones en semillas de maíz, algodón y soja y en “robótica especializada para el mejoramiento genético e insertar los genes mejorados”. Según los organizadores hubo ventas por 170 millones de dólares, sobre todo de maquinarias, contra 143 millones de año anterior, es decir un incremento del 20 por ciento. El Banco de la provincia de Santa Fe otorgó créditos prendarios por 100 millones de dólares y el Galicia por otros 30. Según Clarín, el fabricante de tractores John Deere vendió 350 unidades, a un valor promedio de 100.000 dólares. La alemana Class vendió 16 cosechadoras de 350.000 dólares y Nissan 40 camionetas 4x4. En su entusiasta cobertura del conflicto Clarín, La Nación y Todo Noticias omiten mencionar que tienen tan importantes intereses comunes con una de las partes, y no precisamente la que representa los intereses generales de la sociedad. Esto tampoco ha llamado la atención del Foro para un Periodismo Ético, FOPEA, tan inquieto por el ñoño Observatorio de Medios, que carece de facultades sancionatorias y que en sus tres años de existencia sólo se pronunció sobre los animadores Lucho Avilés (quien invitó a “poner granadas en las bolsas de basura” para que les exploten a los cartoneros) y Roberto Petinatto, por algunos chistes discriminatorios. Ambos fueron invitados a notificarse de esas conclusiones y a reflexionar sobre los posibles efectos de sus programas. Como no están obligados, no concurrieron.