Desde Rosario

Hace un mes, a Rosario le tocó recibir a las estrellas liberales, hoy será el escenario de los rurales. La víspera no alteró el sábado rosarino, salvo para quienes optaron por caminar por la costanera. Allí pudieron ver como una atracción turística el desfile de tractores que se estacionaron a los costados del megaescenario en el que hablarán hoy los cinco dirigentes. Elisa Carrió fue de las primera en llegar, pero no estará sola: la sigue una columna de dirigentes opositores, entre los que finalmente se contarán los socialistas. En tanto, seguía en duda la participación del intendente Miguel Lifschitz.

Los socialistas tuvieron un encuentro con el gobernador Hermes Binner y resolvieron que asistirá al acto el bloque de diputados, encabezado por el senador Rubén Giustiniani. En tanto, Lifschitz –el único político invitado a subir a hablar al palco– se refugió en el silencio. Un dato: el intendente estará en el Te Deum a pocos metros del acto.

Por las peatonales de Rosario ya se empezaron a ver hombres de escarapela en pecho y hasta boina. Entre los rosarinos, el compromiso es más heterogéneo. En las paredes de la Ciudad aparecieron pintadas de que aluden al “aguante de Cristina” y carteles en los que se acusa a De Angeli de vocero de Yabrán” y a Carrió, de “vocera de la Antipatria” (sic).

La Bolsa de Comercio de Rosario se engalanó con no menos de 15 banderones. “Me parece bárbaro el acto, no se le puede meter la mano así en el bolsillo a la gente”, opinó Alejandro, un contador que pasaba por enfrente del edificio. “No estamos muy de acuerdo con el acto, ni con la manipulación que hacen los medios de este tema”, destacó Nora, una psicóloga rubia y con anteojos estilizados que iba de paseo con su marido, Héctor. “No entiendo por qué si los piqueteros cortan, son unos hijos de puta, pero si cortan los hombres del campo, es un paro histórico”, agregó Héctor, detrás de su barba profusa.

No lejos de la peatonal estuvo almorzando Carrió, quien dijo que nadie será capaz de encontrarla hoy: los militantes de la Coalición Cívica tienen la orden de mezclarse entre la gente y no entrar en el palco especial que les prepararon a los políticos. Allí sí estarán el gobernador de San Luis, Alberto Rodríguez Saá, el titular del radicalismo, Gerardo Morales, los dirigentes de izquierda Vilma Ripoll y Raúl Castells, y los de PRO Federico Pinedo, Esteban Bullrich y Francisco De Narváez, entre otros. La vicejefa Gabriela Michetti finalmente no será de la partida, lo que le anota un punto en la interna de la oposición a la CC, que tendrá a su principal figura (aunque se esfuerce por ocultarse y mirar “desde la última fila”).

La mayoría de los opositores llegará hoy en la madrugada o por la mañana, en avión, en auto o en micro. Lilita, en cambio, llegó anteayer, luego de recorrer varios piquetes santafesinos junto a la diputada Susana García. Estuvo en la procesión del Corpus Christi, en torno a la plaza 25 de Mayo, y observó cómo terminaban de armar el palco para el acto. La escenografía es una explosión de celeste y blanco, incluidas las cuatro o cinco carpas detrás. Con un desfile de tractores, acompañados por muchas 4x4, los ruralistas atrajeron la atención de los curiosos, a quienes repartieron volantes (adivinen de qué color). Cerca de allí, María del Carmen se hacía su agosto vendiendo banderas: 25 pesos la chica, y 40, la grande. “Se trabaja muy bien, hay mucha gente de afuera”, comentó a Página/12, feliz con la contribución de “el campo” al país.