El kirchnerismo presentará hoy ante el plenario de las comisiones de Comunicación, Presupuesto y Libertad de Expresión los cambios que introducirá al texto original del proyecto de Servicios de Comunicación Audiovisual que quiere llevar mañana o pasado al recinto de la Cámara de Diputados. Un camino que despejó ayer la decisión de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner de cerrarles a las telefónicas el acceso al negocio de los medios de comunicación. Los bloques de centroizquierda, incluso los socialistas, acogieron con expectativas el anuncio presidencial, aunque quieren ver “la letra chica” de las modificaciones antes de fijar su postura. Los legisladores de la Coalición Cívica harán lo mismo. Todos ellos proponen cambios en la integración de la autoridad de aplicación, que la bancada K estaría dispuesta a conceder. La UCR, PRO, el peronismo disidente y el cobismo siguen militando en el núcleo duro que se opone al proyecto.

Las reacciones en el arco opositor no se hicieron esperar, aunque no todos los partidos coincidieron en la evaluación. Para los más enconados opositores al proyecto prácticamente no cambió nada y lo que hasta ayer decían sobre el peligro de “monopolio telefónico”, lo repetían respecto de la composición de la autoridad de aplicación.

“Esto de las telefónicas demuestra que teníamos razón”, sostuvo a este diario la radical Silvana Giúdici, que preside la Comisión de Libertad de Expresión, de regreso de Mendoza, donde participó del “foro federal” (ver recuadro). El presidente de la UCR, Gerardo Morales, marcó la línea de la futura conducta de los radicales cuando calificó el proyecto como “populista”, “corporativo” y hasta lo asoció con el fascismo (ver página 4).

Mauricio Macri y sus socios usaron pocas palabras para mantenerse en la vereda de enfrente y arremeter contra el proyecto. “El kirchnerismo está entregando lo secundario para conservar lo principal, que es decidir arbitrariamente quiénes serán los dueños de los medios de comunicación por los próximos 20 años”, dijo el jefe de los diputados PRO, Federico Pinedo. Para Francisco de Narváez “la prohibición del ingreso de las telefónicas no resuelve lo esencial, que es el control de los medios de comunicación y su condicionamiento sobre la opinión pública”.

Muy diferente fue la reacción de los diputados del centroizquierda no kirchnerista, proclives a aprobar la iniciativa, aunque reclaman otros cambios. “Lo consideramos un gesto importante para alcanzar consensos, pero veremos mañana (por hoy) cómo queda plasmada en el texto del proyecto la decisión de la Presidenta”, sostuvo Eduardo Macaluse, que preside el bloque de SI que nuclea a otros ocho legisladores. El SI también quiere avanzar sobre otros aspectos de la iniciativa, como ampliar una representación opositora en la autoridad de aplicación.

“Para nosotros el tema de las telefónicas es fundamental, estructural y determinante”, afirmó Claudio Lozano, de Proyecto Sur, que catalogó la modificación como “un triunfo importante” que acerca posturas para el apoyo de la iniciativa. Aunque tampoco quiere sorpresas: “Veremos si el texto del proyecto es fiel a lo que nos dicen”.

“Es una señal de sensatez política y todavía se puede mejorar bastante”, señaló también Fernando “Pino” Solanas. En tanto, el plenario de ATE resolvió mantener la marcha convocada hoy frente al Congreso bajo la consiga “Sí a una ley de medios. No a las telefónicas”. “Si las corren del proyecto lo celebraremos”, sentenció Lozano, quien confirmó la marcha que se realizará al mismo tiempo que sesione el plenario de comisiones.

Entre los diputados del bloque Encuentro Popular y Social (EPyS) –que aglutina a socialistas K y Libres del Sur– había optimismo. Ariel Basteiro, Vilma Ibarra y Cecilia Merchán se reunieron avanzada la noche con el jefe del bloque K, Agustín Rossi, para realizar un repaso de los cambios.

La única voz discordante entre los bloques de centroizquierda fue Miguel Bonasso, de Diálogo por Buenos Aires, quien condicionó su apoyo a que la autoridad de aplicación sea un ente “autárquico”.

Los diputados socialistas volverán a evaluar hoy por la tarde, después del plenario, los cambios a la iniciativa para fijar postura. “Vamos a ver la magnitud de los cambios y decidiremos nuestra posición”, anticipó a Página/12 la jefe del bloque Silvia Augsburger.

El mismo camino recorrerá la CC. Adrián Pérez calificó la decisión de CFK como “alentadora”, aunque mantendrán la postura de sostener cambios sobre once artículos del proyecto, entre ellos la composición de la autoridad de aplicación. Hoy por la mañana volverán a reunirse antes de acudir al plenario.