El padre del adolescente que murió en Baradero contó que él fue inspector de tránsito, aunque se fue porque no estaba de acuerdo con una supuesta política de “correr” a los motociclistas para multarlos. “Yo estuve hace tres años de inspector y me retiré porque él (por el director de Tránsito) nos decía que corramos a los chicos y los paremos como sea”, dijo Hugo Portugal, el padre de Miguel. “Para levantarles una infracción nos hacía arriesgar la vida de los chicos. Yo no sé la legalidad de todo esto”, consideró. “Por ejemplo, nos decían que si una moto venía haciendo ruido, la encerráramos en la camioneta”, dijo. “Me cansé de hablar con él para repetirle que anduviera despacio en la moto porque, según una inspectora, andaba fuerte. Pero él me decía que no”, contó Portugal, quien aseguró que su hijo “tenía el casco, pero no lo usaba”. El hombre indicó que “conocía a los inspectores”, y que éstos los conocían a él y a su hijo. “Ellos no tienen derecho a encerrar una moto y quitarles la vida a dos criaturas. Tiene que ir preso el que cometió el delito, más allá de que mi hijo haya sido un infractor o no.”