La sesión especial de ayer en la Cámara de Diputados para tratar el proyecto de ley de reparación histórica a los pueblos originarios, fracasó. La iniciativa presentada por la diputada de Concertación Forja, Silvia Vázquez, sólo reunió a 23 diputados. “No vamos a aceptar el silencio porque es ser cómplice con la injusticia”, dijo Vázquez en relación con el proyecto de ley para reinstituir a las comunidades aborígenes las tierras que históricamente ocuparon y que apuntaba a tratar en el Día de la Diversidad Cultural. Entre otras cosas, establece “el otorgamiento del status de personas jurídicas de carácter público a los pueblos indígenas, el financiamiento por parte del Estado de actividades de desarrollo económico y cultural, y la reparación de la identidad al considerar nombres y apellidos indígenas”. La convocatoria de la aliada oficialista sólo tuvo la adhesión de diputados de los bloques de centroizquierda y algunos escasos representantes de las bancadas mayoritarias, pero ninguna del bloque oficialista. Tampoco de la única diputada descendiente de los pueblos originarios: la tehuelche Rosa Chiquichano.