Por E. T.
Desde Porto Alegre

Ni siquiera el domingo fue un momento tranquilo para una ciudad que aparece desbordada por los participantes del FSM. La plaza De la Matriz, frente al Palacio Piratini, sede del gobierno estadual, fue el escenario en el que se reunieron los manifestantes solidarios con Venezuela. Al margen de los comentarios y debates que generó la presencia de Hugo Chávez en Porto Alegre, la jornada de ayer estuvo marcada por el conflicto y la discusión. El titular del PT, José Genoino, recibió sobre su rostro el amargo merengue de un pastel que le fue lanzado por una militante que se autodefinió como representante del movimiento de los pasteleros sin fronteras. Estos criticaron al PT y levantaron una propuesta anárquica que concluía con las consignas “un mundo sin líderes es posible” y demostrando que al momento de la ensalada política todos los condimentos son posibles de mixturar, también agregan “que se vayan todos”. Las siguientes son algunas de las actividades del domingo en el III encuentro contra la globalización neoliberal:
- Todo indicaba que la rueda de prensa no pasaría de ser una más de las tantas reuniones anodinas que se suceden en el FSM. Genoino, que reemplazó a José Dirceu, flamante ministro de la Casa de Gobierno, se mostraba orgulloso por el desempeño de Luiz Inácio Lula da Silva en Davos y se jactaba de que con respecto al ALCA el gobierno brasileño “iría por el filo de la navaja” tratando de modificar la agenda que los Estados Unidos tienen prevista para esta iniciativa. Todo era políticamente correcto, hasta que una diminuta militante de los pasteleros, que por esas extrañas pero habituales deficiencias de la organización de esta edición del evento en Porto Alegre portaba la acreditación como periodista, se levantó de la primera fila e imitando los habituales gags televisivos de los Tres Chiflados estampó un pastel sobre Genoino.
Mientras los acompañantes de Genoino en la conferencia limpiaban sus trajes, la seguridad decidió liberar a la joven anarquista que no superaba los 21 años. Genoino continuó disertando pero ya todo había terminado. La frutilla estaba en el piso cuando Genoino sostuvo que “estoy honrado de recibir la agresión de estos anarquistas, aventureros e inconsecuentes que simplemente son funcionales para que se mantenga el statu quo dominante”.
- El título “Movimiento social, espontaneidad y construcción de una alternativa política” fue el taller en el que se intentó explicar la crisis que enfrenta nuestro país, las características de la revuelta del 19 y 20 de diciembre, y algunos puntos de unidad política. Organizada por la agrupación Democracia Avanzada en el ARI, que lidera Jorge Makarz, la mesa congregó al economista de ATTAC, Julio Gambina; a Nora Cortiñas, de Madres de Plaza de Mayo, Línea Fundadora; a la socióloga Alcira Argumedo; al titular de ATE Capital, Pablo de Miceli, y a Eduardo Múrua del IMPA. Ausente con aviso, el cineasta Fernando “Pino” Solanas estaba participando de un encuentro con el presidente venezolano. Gambina reivindicó la Autoconvocatoria contra el ALCA. Señaló que si bien este movimiento es tan amplio que contiene a quienes sostienen que la salida de la actual crisis política sólo puede hacerse mediante el socialismo, también hay sectores que no comparten estas posiciones. “La idea es que nadie quedara afuera”, concluyó Gambina.
Argumedo afirmó que “en Brasil el neoliberalismo no había realizado la catástrofe que si concretó en la Argentina”. Para la socióloga argentina “la crisis no es económica, ni financiera sino política”. En su vehemente y muy aplaudida alocución resaltó las formas de organización que deben tener las herramientas políticas que deben construirse para salir del actual estado de cosas. Cortiñas señaló que no recordaba cuándo las Madres habían comenzado a sostener políticas contra el neoliberalismo, pero redondeó su idea diciendo que cuando los ahorristas protestaban frente a las puertas de los bancos ella concurría con un cartel que decía que “primero se llevaron a nuestros hijos y hoy se están llevando el país”. Claro, admitió que no siempre los que protestaban contra el corralito las recibían en los mejores términos.
Makarz opinó que “el movimiento social del ‘que se vayan todos’ todavía no fue capaz de organizar una alternativa política contra el modelo económico. En su rechazo de la política puede correr el riesgo de construir una horizontalidad sin horizontes”.
Fue un día de domingo muy movido. Por cierto los debates sobre Argentina continúan. Son ideas y no son tan fáciles de sintetizar como las matemáticas. Aunque claro éstas también suelen ser tan abstractas como algunas de las discusiones que dominan el Foro Social Mundial.

Informe: Gladys Balonga.