“Mateo Goretti está severamente comprometido en este delito. El es un especialista. No puede decir: ‘Pensé que era una colección privada’. Él tiene que saber que se trata de una colección muy conocida y del valor de lo que compró”, sostiene la ministra de Seguridad, Nilda Garré, en diálogo con Página/12. La funcionaria se preguntó si Mauricio Macri y los otros miembros de la Fundación Pensar “saben con quién comparten responsabilidades” en el think tank macrista.

–¿Cómo se recuperaron las piezas arqueológicas?

–Intervino en su momento la Justicia de la provincia de Córdoba. Después, por la envergadura de piezas de tanto valor, pasó a la Justicia Federal, a cargo de Liliana Del Valle Navarro. Hace un mes hubo una pista e intervino la sección Interpol de la Policía Federal. La pista tenía su destino en Buenos Aires, por lo que hubo un exhorto de la jueza para hacer allanamientos. Todos a domicilios de Mateo Goretti. En uno de los cuatro domicilios, encuentran una cantidad de piezas que, sugestivamente, estaban envueltas en papel de diarios de la época del robo. Lo que indicaría que la ha comprado directamente a los ladrones. Y que no ha habido otras intermediaciones en el medio. Este es un robo del año 2008.

–¿Cómo y de qué lugar se habían robado las piezas?

–De un museo en La Falda, Córdoba. El museo está en el Hotel Eden, construido por los alemanes. Allí deciden exhibir la colección los herederos de Aroldo Rosso.

–¿A qué suma asciende el valor de las piezas?

–Se habla de cuatro millones de dólares por la colección completa. Se dice que lo que se recuperó, las 58 piezas, tendría un valor de 700 mil a un millón de dólares. Lo importante en este tema es el valor arqueológico.

–¿Qué rol consideran que tiene Goretti en estos delitos?

–Estaban en su casa, en un domicilio que estaba usado como depósito. El tiene un rol fundamental en este circuito: es el comprador y sería el encubridor del delito, porque estaba ocultando estas piezas. Ahora está imputado, y en los próximos días se le tomará declaración y la jueza definirá la responsabilidad que le cabe. El había intentado abrir un museo con piezas y tuvo un enfrentamiento con (el ex secretario de Cultura, Torcuato) Di Tella. El museo parecía ser una pantalla de objetos robados.

–¿Está detenido?

–No, recién se remitieron las piezas a Córdoba. Y la Justicia empezará a actuar con la llegada de los elementos. Pero bueno, es un hombre que insiste en esto de obtener ilegalmente objetos de este tipo.

–¿Goretti, además, es un hombre vinculado al PRO?

–Eso es lo increíble. Aparece como coordinador de la restauración del Teatro Colón. Cuando ocurrió la controversia con Di Tella, era presidente de la Fundación Pensar. En este momento es integrante de Pensar, porque el presidente es Macri. Uno se pregunta si tienen noción de con quién están compartiendo responsabilidades. Esta Fundación tiene una cantidad de integrantes del PRO. El también es integrante de una empresa llamada Nueva Comunicación, que tiene como cliente a Boca Juniors.

–¿Qué medidas cree que debería tomar el jefe de Gobierno porteño?

–Me parece obvio que tiene que separar a este señor de todas instituciones y de cualquier actividad que desarrolle en el ámbito de la ciudad de Buenos Aires. Está severamente comprometido en este delito. El es un especialista. No puede decir: “Pensé que era una colección privada”. El tiene que saber que se trata de la colección Rosso, que es muy conocida y sabe el valor de lo que compró y que había una causa penal. El viajó hace poco a Córdoba, así que suponemos que allí concretó la compra de estos objetos robados, de alto valor arqueológico.

–¿Cree que desde el macrismo van a decir que esto es una “operación del Gobierno”, como hicieron en el caso de las escuchas ilegales por el que se encuentra procesado Macri?

–En esto intervinieron la Justicia cordobesa, un juez federal de Córdoba, Interpol, un juez federal de la Ciudad. Me parece que esto es incuestionable. Son procedimientos vinculados a actividades de la Justicia. No- sotros simplemente cumplimos las medidas que ordena la jueza.