La sesión del miércoles que viene en Diputados permanece entre signos de interrogación luego de que los jefes de los bloques de la oposición les anticiparan la semana pasada a las autoridades de la AMIA y la DAIA su intención de no facilitar el quórum. “Estamos justo, pero llegamos”, aseguraban ayer cerca de la conducción de la bancada del Frente para la Victoria en la Cámara baja que imaginaban que podían ganar algunas voluntades luego de que el proyecto recibiera anoche la media sanción en el Senado. Los números están complicados para el oficialismo porque, además de la decisión opositora, diputados que en ocasiones acompañan al kirchnerismo, en esta oportunidad adelantaron su rechazo, como los peronistas Felipe Solá, Jorge Yoma, Facundo Moyano y Omar Plaini. A eso se le suman dos bajas fuera de libreto como las del chubutense Carlos Eliceche y la tucumana Beatriz Mirkin, quienes asumieron como ministros en sus provincias. Serán reemplazados, pero para eso el kirchnerismo necesita conseguir quórum y arrancar la sesión. “Seis votos menos en un bloque que siempre está justo es mucho”, evaluaban en el bloque del FpV. “Nosotros siempre necesitamos de aliados, así que la cosa no está resuelta. Creo que, como muchas veces, esto se va a resolver la noche anterior y estoy seguro de que vamos a tener los votos”, agregaban, con confianza.