Dirigentes de la oposición de centroderecha se citaron al frente del Palacio de Tribunales para rechazar los proyectos de reforma judicial enviados al Congreso por el Poder Ejecutivo. Junto a legisladores, empleados judiciales y funcionarios de la Justicia, el jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri; el presidente de la Unión Cívica Radical, Mario Barletta, y el empresario Francisco de Narváez, entre otros, reclamaron “mayor debate” de la reforma.

Bajo una bandera argentina con la leyenda “Sin Justicia no hay futuro”, los principales dirigentes de la oposición se reunieron en la puerta del Palacio de Justicia para hacer un reclamo y manifestarse en contra de la propuesta de democratización judicial que envió la presidenta Cristina Fernández de Kirchner al Congreso. “Lo que hay que cambiar es el modo de trámite de los procesos; un proceso que dura diez años esteriliza el derecho de los reclamantes, la estupidez de pensar que tocando las medidas cautelares que dependen del proceso principal se va a solucionar devela un punto de vista equivocado”, señaló el diputado radical Ricardo Gil Lavedra.

A la hora del acto en Tribunales, los proyectos de modificación del Poder Judicial eran sometidos a discusión en plenarios de comisión en el Senado y en Diputados. Los opositores prefirieron priorizar la foto, aunque no todos posaron ante las cámaras: ni el Frente Amplio Progresista ni Proyecto Sur participaron del encuentro por sus diferencias con el macrismo.

“La Justicia es una de las instituciones que necesita reformas, pero lo que el oficialismo busca es el manejo del Poder Judicial”, denunció Barletta luego de participar de la foto que estaba encaminada a mostrar una oposición unida contra el kirchnerismo. Sin embargo, Macri, con quien un sector de la UCR mantiene conversaciones para presentarse en octubre en un frente común, destacó que la presencia de casi todo el arco opositor “no significa que somos todos del mismo partido y que proponemos las mismas soluciones”.