El papa Francisco envió ayer un mensaje de “oración y cercanía” a la presidenta Cristina Fernández de Kirchner y le aseguró que rezará por “su total restablecimiento” de la intervención quirúrgica por un hematoma en el cráneo a la que fue sometida. “Pido a la Virgen María, a Nuestra Señora de Luján, que la fortalezca a usted, para que mantenga alta la esperanza y pueda nuevamente volver a sus responsabilidades cotidianas”, expresó el pontífice en un breve comunicado difundido ayer por la mañana por la oficina de prensa del Vaticano.

“En estos momentos tan particulares, deseo hacerme presente con mi oración por usted y el total restablecimiento de su salud”, manifestó en su misiva el ex arzobispo de Buenos Aires. En el breve documento, tras pedirle que “por medio de estas palabras, le ruego me sienta presente”, le aseguró su “oración y cercanía”.

Francisco le dijo a la primera mandataria que pide “a la Virgen María, Nuestra Señora de Luján, que la fortalezca, para que mantenga alta la esperanza y pueda nuevamente volver a sus responsabilidades cotidianas”. Además saludó a la familia de Fernández de Kirchner y a su entorno íntimo: “No me olvido de sus familiares en estas duras circunstancias, ni tampoco del personal médico que la asiste, suplicando al Señor que le dé luz para que acierte en sus decisiones”, agregó.

“Que Jesús la bendiga y la Virgen Santa la cuide”, concluyó el Papa que, desde que fue elegido, el 13 de marzo, mantuvo dos encuentros con la primera mandataria: uno en el Vaticano, el día anterior al inicio de su pontificado, y otro a fines de julio, en el marco de la Jornada Mundial de la Juventud en Río de Janeiro, Brasil.

Además de Francisco, también saludó a la Presidenta a través de un escrito el presidente de la Conferencia Episcopal Argentina, José María Arancedo. El mensaje, cuyo texto no fue difundido, sino directamente entregado al secretario de Culto de la Nación, Guillermo Oliveri, en la noche del lunes, transmitió a Cristina Fernández de Kirchner un saludo ante su cuadro de salud y comprometió, en nombre de los demás obispos, plegarias para una pronta recuperación.