Mario Aurelio Poli, elegido por Jorge Bergoglio para ser el próximo cardenal argentino, es un hombre cercano a su perspectiva, de su entera confianza, considerado moderado y de bajo perfil. Tiene 66 años y es porteño. Se ha definido a sí mismo como un religioso “no político” y “no mediático”. Su designación como cardenal estaba dentro de las especulaciones desde que, luego de asumir como Papa, Bergoglio lo nombró para ocupar su lugar al frente del arzobispado porteño, con una decisión que dejó fuera de juego al sector ultraconservador de la Iglesia Católica.

Poli nació en Buenos Aires el 29 de noviembre de 1947. Se convirtió en sacerdote a los 31 años, ordenado por el entonces cardenal Juan Carlos Aramburu en 1978.

Estudió Servicio Social en la Universidad de Buenos Aires y Teología en la Universidad Católica Argentina. Es además profesor de Historia eclesiástica.

Cuando el papa Juan Pablo II lo designó obispo, en el 2002, eligió a Bergoglio para que lo consagrara; la relación entre ambos se volvió cercana en los seis años que siguieron, y en los que Bergoglio le encomendó trabajar como su vicario en la zona de Flores, su barrio natal. Poco proclive a la exposición pública, en los años recientes, ya en su función como obispo, debió intervenir en cuestiones de interés común. Opositor al matrimonio gay, admitió sin embargo la validez de la unión civil. En el 2012 sancionó al sacerdote Luis Hidalgo, que había felicitado públicamente a Jorge Rafael Videla por su cumpleaños. “No fueron 30 mil (desaparecidos) ni fueron inocentes, feliz cumpleaños, general”, escribió el cura. Poli le advirtió que esa actitud había causado “un grave daño a la Iglesia” y escribió una carta que fue leída en las parroquias criticando el episodio. En un reportaje que dio al diario La Nación en marzo pasado aseguró: “(Enrique) Angelelli es un santito para mí, un santo mártir”.

Su último destino antes de regresar a Buenos Aires fue como obispo de La Pampa, donde fue enviado cuando esa diócesis atravesaba un escándalo por denuncias de maltrato, trata y reducción a la servidumbre contra el Instituto Servi Trinitatis. Tras una larga investigación judicial, los sacerdotes acusados fueron sobreseídos.

Del próximo cardenal porteño se dice que conoce a la mayoría del clero ordenado en las últimas décadas en la ciudad de Buenos Aires. Durante más de veinte años fue uno de los superiores del seminario metropolitano de Villa Devoto. En ese período fue director del Instituto Vocacional San José, donde los jóvenes que quieren convertirse en sacerdotes hacen su primer año de formación. Poli es el capellán nacional de los Boy Scout, organización. En el ámbito de la Iglesia lo definen como un hombre cercano a la religiosidad popular, que recorre las parroquias y promueve el contacto directo con los fieles.