Gobernadores, ministros, senadores y diputados del oficialismo que no integran La Cámpora se sumaron, en distintos tonos, al desafío que lanzó Máximo Kirchner a la oposición para que se anime a enfrentar a Cristina Fernández de Kirchner en las urnas. “Todos fustigan al Gobierno, pero nadie puede imponerse en las urnas, quiere decir que hay un apoyo mayoritario de la sociedad argentina”, dijo el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich. Para el gobernador bonaerense Daniel Scioli, decir que el hijo de la Presidenta planteó una re-reelección “es una falsa interpretación del mensaje que ha dado, con un fuerte contenido político”. “Si dicen que el peronismo está agotado, para derrotarlo definitivamente lo tienen que hacer en las urnas con su jefa a la cabeza”, insistió el diputado Carlos Kunkel. “Si hablan tan mal de Cristina, ¿por qué no la dejan competir? Modifiquemos la Constitución”, subió la apuesta el senador Aníbal Fernández. El presidente de la Cámara baja, Julián Domínguez, dijo que Máximo sostuvo que “el liderazgo más importante lo tiene Cristina” y recordó que “ya dijo la propia Presidenta en el Congreso, que no se hicieran los rulos”, para responder al cuestionamiento opositor a una posible re-reelección.

Capitanich remarcó que la Presidenta es “líder excluyente de ese proyecto político y combina una sólida base territorial, un proyecto político, con una identificación ideológica y una clara visión” y “un liderazgo muy marcado dentro de este espacio”. El ministro sostuvo que Máximo Kirchner transmitió que “todos fustigan al Gobierno, pero nadie puede imponerse en las urnas, lo cual quiere decir que hay un apoyo mayoritario de la sociedad argentina. Me parece que ésta es la expresión y eso es lo que ha querido manifestar con mucho énfasis” y agregó: se trata de “un dirigente que tiene muchas condiciones políticas y ojalá pueda participar muy activamente a partir de ahora”.

“Desde lo político, ha dicho con toda claridad la importancia de proyectar hacia el futuro este proyecto y que no sea siempre un volver a empezar, defendiendo las políticas que se están llevando adelante como la reindustrialización y el desendeudamiento argentino”, resaltó Scioli desde Alemania. “El (por Máximo) convoca a la responsabilidad que tenemos entre todos en este proyecto colectivo, de defender los logros y avanzar en la gran agenda del desarrollo”, insistió el gobernador.

“El desafío que hacemos es si estarían dispuestos a competir con la jefa de nuestro partido, ya que ellos dicen que se agotó. Que digan si están dispuestos o no, y si no están dispuestos, que digan el porqué”, repitió Kunkel en referencia a los partidos y alianzas opositoras. “Ellos tienen que contestar ahora, nosotros ya hemos dicho lo que teníamos que decir”, sentenció el diputado antes de agregar que “el proyecto del peronismo está en el colectivo de su militancia. Nosotros acompañamos a las personas que lo conducen en cada momento histórico”.

Fernández chicaneó a la oposición con la reforma de la Constitución, aunque aclaró que el hijo de la Presidenta no sugiere abiertamente la modificación de la Carta Magna. “Hago el análisis de laboratorio que hizo Máximo; sin ser un exégeta, comprendo lo que dijo”, arrancó el senador, para luego explayarse: “¿No dicen que es tan mala? Modifiquemos la Constitución y así le ganan fácil”, completó el senador.

“Sin duda que cualquier dirigente político que gobierna una nación durante diez años y medio, y tiene el nivel de apoyo que tiene nuestra Presidenta, es el arquitecto del futuro, y es impensable que quien conduce no construya el puente hacia el tiempo por venir”, explicó Domínguez para referirse al discurso de Máximo Kirchner. “El formato se lo irá encontrando –continuó Domínguez–, pero la Presidenta será un elemento ‘precisor’ en el tiempo que viene.” “No tengo duda ninguna”, respondió el diputado ante la consulta de si consideraba que Cristina será la gran electora para las presidenciales de 2015.

“Para la re-reelección se necesitan mayorías absolutas y nosotros no las tenemos. La oposición no quiere competir con Cristina, si la oposición aceptara, gana Cristina”, sumó el diputado Héctor Recalde. El abogado laboralista también resaltó que “en estos momentos con tanto ataque exterior, la Presidenta tiene una aprobación de más del 40 por ciento. En término electoral, no hay ninguno que se le acerque. Cristina gana sin ballottage, en primera vuelta”.

El director ejecutivo de la Anses, Diego Bossio, reconoció que estuvo el sábado por la tarde en la cancha de Argentinos Juniors como “un militante” y que lo sorprendió, porque lo desconocía, que Máximo fuera uno de los oradores del acto de La Cámpora. Para Bossio, el discurso de Máximo no fue un pedido de re-reelección, sino que quiso mostrar la “vocación a las urnas”, que es donde se dirimen democráticamente las diferencias. “Fue claro el mensaje, legitima el voto popular. Este es un proyecto político que siempre se enfrentó a las urnas”, concluyó el titular de la Anses.

El diputado cordobés Fabián Francioni también sumó su interpretación. “Hoy no están dadas las condiciones constitucionales para que Cristina sea candidata (por un nuevo período presidencial), pero también hay que admitir que hay mucha gente que quiere que lo sea”, señaló.