La fiscal Viviana Fein, a cargo de la causa por la muerte de Alberto Nisman, estará de licencia a raíz del fallecimiento de su madre y por una semana su reemplazante será su colega Mariana García. El expediente está en una suerte de paréntesis, mientras la Sala VI de la Cámara del Crimen vuelve a analizar un pedido de la querella de Sandra Arroyo Salgado y sus hijas para que la jueza Fabiana Palmaghini asuma la investigación, que hasta ahora siempre estuvo dirigida por Fein. Este viernes está convocada una audiencia en ese tribunal, donde las partes expondrán su posición sobre quién debe conducir el caso.

Fein ya está de licencia desde la semana pasada, ya que su madre –quien murió a los 90 años– sufría una enfermedad terminal. En los últimos días quedó a cargo de la fiscalía de Graciela Gils Carbó, pero el expediente no tuvo casi movimientos, ya que lo había pedido completo la Cámara para analizarlo y lo devolvió sobre el final de la semana. Hay dos planteos centrales que deben resolver los camaristas. Uno es un pedido del empresario Alejandro Picón para que le devuelvan el automóvil Audi que utilizaba habitualmente el fiscal Nisman. Ese pedido había sido rechazado por la fiscalía y el juzgado porque todavía no está claro si podría ser necesaria alguna medida extra sobre el vehículo. La otra cuestión es que la pesquisa pase a estar conducida por Palmaghini, algo que ya en otras ocasiones pidió sin éxito la querella, cuando todavía tenía una representación de la Defensoría General de la Nación.

Los nuevos abogados de Arroyo Salgado –Juan Pablo Vigliero, Manuel Romero Victorica y Federico Casal– volvieron a la carga con ése y otros planteos, como la realización de una junta única entre criminalistas y forenses. Como es conocido, las pericias criminalística (sobre la dinámica de la muerte y las marcas en el lugar, como los rastros de sangre) y la forense (basada en la autopsia, las lesiones y la data de la muerte) dieron como resultado por amplia mayoría que el fiscal falleció cerca del mediodía del domingo 18 de enero y que no hay nada que indique la presencia de terceros en el hecho. La mayor parte de las pruebas apuntan a que se disparó a sí mismo.

En una audiencia pública que ya se hizo en la Cámara por la misma discusión, Fein y Arroyo Salgado se dirigieron fuertes cuestionamientos mutuamente. Por entonces, la Cámara decidió que siguiera la fiscalía con la causa. Todavía hay medidas pendientes, algunas vinculadas con el peritaje informático, sobre teléfonos y computadoras. Y declaraciones testimoniales sobre algunos datos recientes, como la presencia de una custodia de la Prefectura en el edificio Le Parc.