- Protesta. Mauricio Macri no se salvó de los escraches ni en Berlín. Antes de reunirse con la canciller Angela Merkel, Macri se encontró con un grupo de personas que sostenían carteles que decían “Macri Im Panamá Papers” o “Macri free Milagro Sala”. Uno, en castellano, decía “Macri = persecución política”. Se trataba de integrantes del grupo Argentinos para la Victoria, que no le dieron paz al presidente ni en tierra alemana.

- Neocon. Además de la reunión con Merkel, Macri tuvo un encuentro con el ministro de Economía Alemán, Sigman Gabriel, y luego mantuvo otro con el presidente de la República Federal de Alemania, Joachim Gauck, en el Palacio de Bellevue, lugar en el que fue recibido con honores militares. Por la tarde, Macri brindó una conferencia en la Fundación Konrad Adenauer, donde se llevó los aplausos de un auditorio de unas 300 personas afines a la Unión Demócrata Cristiana (CDU), el partido de Merkel. Macri les dijo que debe “acelerar el proceso de inversión, porque frente a las luces lindas que presenta el populismo, uno tiene que ofrecer resultados concretos para afirmar las ideas que está impulsando”.

- Default. El jefe de Gabinete, Marcos Peña, explicó que “estábamos en un default de confianza, no solo financiero”. “Por eso, en este momento, en medio del Brexit, que es la mayor crisis que ha tenido la Unión Europea, lo más importante es transmitir que creemos en los valores de democracia, en el libre comercio y la integración”, dijo en un contacto con la prensa en Berlín.

- Barenboim. Macri también tuvo un encuentro con el director de Orquesta Daniel Barenboim, con el que se reunió por la tarde y conversó sobre un plan para recibir a unos 3000 refugiados sirios en Argentina. Macri cerrará su gira mañana con una nutrida agenda con empresarios (se destacan las automotrices Mercedes-Benz y Volkswagen, la tecnológica Siemens y un almuerzo en la Asociación de Cámaras de Comercio e Industria) y con una visita al Parlamento alemán.