El Ente Unico Regulador de Servicios Públicos de la Ciudad desembarcó ayer en las estaciones de subtes para señalar diversas fallas en los sistemas de seguridad, que indicó en un informe. Entre ellas los nuevos molinetes, que no son removibles como exige el contrato de concesión. Metrovías rechazó las acusaciones e hizo notar que la entidad encargada de controlar el servicio es la Comisión Nacional de Regulación del Transporte (CNRT), que depende de la órbita nacional y no de la ciudad. Dispuesto a pelear por la competencia porteña sobre el control de los servicios que allí se prestan, Julio Balbi, director del Ente, le llevará el viernes al secretario de Seguridad, Juan José Alvarez, una propuesta para armar un plan de contingencia en caso de emergencia en la red de este transporte.
“En la rutina, el ente siempre encuentra anomalías, falencias en la señalización y carencia de algunos matafuegos”, contó Balbi a este diario. “Faltan carteles de concientización para el usuario, para que sepa qué hacer ante una emergencia. Los que hay no son muy accesibles a la visión”, dijo. En cambio, “los carteles de publicidad se ven siempre”.
Otra objeción del ente fue la falta de funcionamiento de varias escaleras mecánicas. La más notoria es la que está inmóvil en la estación Diagonal Norte (Línea C), una de las más transitadas por los 600 mil usuarios diarios del servicio. “Hay escaleras clausuradas desde hace meses, cuando por contrato no pueden estar detenidas por más de dos horas semanales”, indicó Balbi.
El director del ente comentó que, “según el contrato de concesión”, al cambiarse los molinetes de cospel por los actuales de tarjeta, “se tenían que poner unos que no fueran fijos. Tenían que ser móviles, para que en caso de evacuación se los retire para no obstruir la salida de los pasajeros”. Balbi contó que todas estas irregularidades pueden ser motivo de “multas, inhabilitación y hasta de caducidad de la concesión”.
Metrovías salió al cruce y desestimó el informe del ente regulador. En un áspero comunicado, negó “rotundamente” la existencia de deficiencias en sus sistemas de seguridad. “Todas las estaciones y coches cuentan con matafuegos y personal capacitado para operarlos”, aseveró, y sostuvo que “todas las salidas de las estaciones están debidamente señalizadas de manera clara y visible. Además, existe un Cuerpo de Intervención Rápida (CIR) especialmente capacitado para operar en situaciones de emergencia”.
Amén de estas explicaciones, la empresa aclaró que “el órgano de control de los subtes es la CNRT, que conoce los planes anti-catástrofe y los trabajos que realiza Metrovías para asegurar los más altos índices de seguridad posibles”. Prueba de ello “es la ausencia de incidentes que orgullosamente podemos mostrar”, manifestó Metrovías. Y precisó que “trabajamos temas de seguridad permanente con Defensa Civil, la Superintendencia de Bomberos, la Cruz Roja y el SAME”.

Informe: Sebastián Ochoa.