EL PAíS
• SUBNOTA
“Incumplimiento de los deberes de funcionario”
consideraron “exagerada” la figura de homicidio culposo agravado aplicada a los ex funcionarios porteños procesados por la tragedia de Cromañón. Ambos coincidieron en opinar que la imputación más adecuada sería la de “incumplimiento de los deberes de funcionario público”, a pesar de que la consecuencia del mismo fue la muerte de 193 personas.
“Es correcta la calificación de cohecho para los policías, pero me parece forzada la imputación de homicidio culposo para los ex funcionarios públicos que cometieron con toda seguridad un grosero incumplimiento en sus deberes. El problema es que se trata de un delito con una pena muy blanda (dos años de prisión como máximo). Posiblemente, si la Cámara cambia la calificación, la desazón de la opinión pública vaya a ser grande, pero no es por una inconducta de los jueces, sino porque nuestro sistema judicial sólo es eficiente para meter presos a los ladrones de gallinas, porque es un sistema clasista, que sanciona con mayor severidad no a los delitos más graves sino a los que cometen los marginales. Por eso las penas para los funcionarios públicos son leves”, evaluó Luis Dorbnierski, director del Instituto de Derecho Penal del Colegio Público de Abogados de la Capital Federal.
Para el abogado Eduardo Guarna también debería imputarse a los ex funcionarios porteños el delito de incumplimiento de los deberes de funcionario público. “Lo que no hicieron es cumplir con su deber de vigilancia, si bien la consecuencia es la muerte de casi doscientas personas”, señaló.
A criterio de Dorbnieski, “es muy difícil entender que un funcionario sea responsable de un homicidio sucedido en un lugar en el que él lo que tiene que hacer es controlar la aplicación de las normas”. “Si no lo hace, comete incumplimiento de los deberes de funcionario público, que es un delito doloso, en el que hay que demostrar la intencionalidad de cometerlo. En el homicidio culposo, en cambio, se actúa por negligencia. El juez, entonces, se da cuenta de que es muy difícil probar que los funcionarios actuaron con intención de dolo al no cumplir sus deberes. Y les reprocha negligencia en un homicidio culposo”, argumentó Dorbnieski.
Nota madre
Subnotas