El traslado de Alejandro Rúa de la Unidad AMIA del Ministerio de Justicia a su nuevo puesto en el Ministerio de Defensa deja margen para la preocupación entre los familiares de las víctimas, porque el funcionario era prácticamente el único motor del Poder Ejecutivo en las investigaciones referidas al atentado, en especial las que tenían que ver con el modo en que se desvió la causa judicial, el pago ilegal de los 400.000 dólares a Carlos Telleldín y el armado de pistas falsas.
El trabajo de Rúa consistía en conseguir el enjuiciamiento de los protagonistas de las irregularidades como Carlos Menem, Juan José Galeano y distintos integrantes de los poderes Ejecutivo y Judicial del menemismo. Desde hace meses los familiares agrupados en Memoria Activa vienen reclamándole al Gobierno que se firme un decreto por el cual Rúa pueda actuar como querellante en las causas vinculadas a AMIA, pero el Ejecutivo acumula un llamativo retraso y tiene cajoneado el decreto desde marzo. Anoche, una importante fuente del Ministerio de Justicia sostuvo que Rúa será reemplazado por un funcionario destacado –cuyo nombre no quiso revelar– y que además será contratada para trabajar en la Unidad la abogada María Lousteau, una de las que mejor conoce la causa AMIA.
La Unidad AMIA se fundó porque se quiso demostrar la voluntad del Estado en impulsar las investigaciones, tanto sobre la autoría del atentado como de las irregularidades cometidas por los funcionarios políticos, los judiciales, los integrantes de las fuerzas de seguridad e inteligencia. Desde esa Unidad, Rúa aportó numerosos elementos a la causa judicial y fue clave para que se levantara la prohibición de que declaren en el juicio oral los agentes de la SIDE que participaron en el pago a Telleldín.
En los últimos tiempos, Rúa trabajaba en el expediente sobre las irregularidades del caso AMIA:
- Cuestionó al juez Claudio Bonadío, que debía esclarecer las maniobras en la pesquisa, pero casi no movió la causa desde 2001. Recientemente fue desplazado del expediente por los jueces de la Cámara del Crimen.
- Rúa insistía en que la Unidad AMIA, integrante de la Oficina Anticorrupción, debía ser parte de todos los procesos judiciales porque el Estado fue estafado en 400.000 dólares pagados ilegalmente a Telleldín.
- Las presentaciones de Rúa apuntaban a enjuiciar, con la perspectiva de llevarlos a la cárcel, a los que se consideran protagonistas de las maniobras, desde la cabeza, el ex presidente Menem, pasando por la jefatura de la SIDE, el juez Galeano y todo su equipo.
Respecto de la investigación misma del atentado, el papel central lo tienen los fiscales especiales Alberto Nisman y Marcelo Martínez Burgos. Rúa colaboraba con ellos.
Anoche, fuentes del Ministerio de Justicia negaron que el pase de Rúa de Justicia a Defensa constituyera un nuevo síntoma del desinterés oficial en el caso AMIA. “Rúa será reemplazado por un funcionario de primer nivel, que asumirá la jefatura de la Unidad. También se ha decidido que trabaje en la Unidad la abogada María Lousteau, asistente del observador de la OEA en el juicio oral, Claudio Grossman. Lousteau tiene un gran conocimiento de todo lo que tiene que ver con AMIA. Además, con la designación de un nuevo titular de la Unidad AMIA se firmará el decreto por el cual podrá ser querellante, representar al Estado en los expedientes del atentado. Es ese decreto que nos reclama Memoria Activa.”