El levantamiento del corte de ruta en Gualeguaychú generó expectativas en los gobiernos de Argentina y Uruguay por el restablecimiento de las negociaciones en el conflicto por las papeleras. Aunque, desde ambos lados del Río de la Plata eligieron mostrarse cautelosos y cada uno ratificó sus exigencias. El canciller Jorge Taiana consideró “un paso muy importante” que los vecinos de Gualeguaychú levantaran el corte del puente que los une con Fray Bentos, pero advirtió que ahora “vamos a ver qué hacen las papeleras”. Su par uruguayo, Reinaldo Gargano, evaluó como “una señal” la suspensión de los cortes, y opinó que se trata de “un matiz muy importante”. Pero el ministro de Vivienda y Medio Ambiente de Uruguay, Mariano Arana, afirmó que “no se puede ir más allá del diálogo, si esta situación absolutamente ilegítima no queda nítida y claramente resuelta” y sostuvo que “me quedé un poco frustrado, no concibo que se levante un corte a medias”, en referencia a la decisión de la asamblea de Colón.