Tal vez haya llorado ese día, claro. Pero no salió en la foto, fusil al hombro y lágrimas en la cara, como su colega Roberto Vassie, quien ya fue invitado al acto de traslado de los restos de Juan Domingo Perón, luego de que el presidente Néstor Kirchner insistiera en encontrarlo. El otro, quien en un principio dijo ser el soldado inmortalizado en aquella imagen, José Arnoldo Vázquez, no apareció más. Según comentaron con sorna fuentes del Ejército, “al ver que dimos con el verdadero, se borró y nunca más nos contestó las llamadas”.

Luego de que el Presidente diera, el jueves por la noche, la orden de buscar al soldado fotografiado el 1º de julio de 1974 durante el funeral del General, la oficina de prensa del Ejército se dedicó de lleno a la dificultosa búsqueda. El rostro de aquel soldado recorrió el mundo tras aparecer en la revista Gente, desfigurado por el llanto al paso de la procesión que acompañó los restos de Perón.

Primero pidieron la foto al semanario y a un historiador peronista. Allí, los investigadores tomaron las dos primeras letras de su apellido del uniforme: VA. Con ese dato buscaron en los registros, entre los soldados que hubieran estado de servicio. Allí aparecieron dos Vázquez. Cuando llamaron al primero, José Arnoldo, aseguró ser el de la foto.

Pero, enterado de la movida, luego apareció Roberto Vassie, junto a varios ex compañeros, fotos y documentos que probaban que él era el protagonista de aquella recordada imagen. Ayer, Vassie fue recibido en el Comando del Ejército para despejar las dudas. Vázquez, que también estaba citado, no apareció. Hoy, entonces, habrá un espacio para Vassie en el inmenso palco en la quinta de San Vicente y probablemente también viaje en el jeep que encabezará la procesión desde la CGT.