El intendente de la localidad uruguaya de Colonia, Walter Zimmer, les recomendó a los asambleístas “darse un buen chapuzón para enfriarse un poco” y advirtió que “lo que mal empieza, mal termina”. Consultado sobre la protesta del domingo contra la entrada en funcionamiento de la planta de Botnia, opinó además que “las dos cancillerías actuaron mal”. Y criticó al gobierno argentino, porque “cuando uno hace la vista gorda y deja a la población hacer lo que tendría que estar haciendo la Cancillería, la cosa se pone muy difícil”.

Otro que habló sobre la manifestación fue el intendente de Fray Bentos, Omar Lafluf: “En lo personal estoy preocupado por la gente de Fray Bentos, porque está nerviosa y con rabia por todo lo que está sucediendo... Vengo pidiendo calma y espero que todo termine bien”, sostuvo. En declaraciones publicadas en los medios gráficos uruguayos agregó que “lo mejor, por la salud mental de todos, sería que no vinieran. Esto puede terminar mal, porque la gente del lugar está muy cansada”. Lafluf había pedido públicamente el cierre de la frontera para evitar la manifestación en la puerta de Botnia, pero el gobierno de Tabaré Vázquez descartó la idea. Las autoridades dijeron que “no está amenazada la soberanía del país y por esa razón no tiene sentido pensar en cerrar la Aduana”. La medida, por otra parte, iría en contra de los reclamos que Uruguay viene formulando a la Casa Rosada para que desaloje el corte del puente.