Lo escoltaban la vicejefa Gabriela Michetti y el vicepresidente primero de la Legislatura, Diego Santilli. Detrás, como en una versión PRO de la Ultima Cena, estaba el bloque macrista en pleno. Pero a Mauricio Macri no se lo veía contento. Tal vez por eso optó por hacer una breve conferencia de prensa en la que no respondió preguntas. “Estamos muy conformes con el paso de firmeza y decisión que hemos dado hoy”, planteó el Jefe, quien destacó que “la desregulación es de estricta justicia. No vamos a aflojar”. “Gracias a la ley, el proceso sigue adelante y la intervención continuará mañana”, afirmó. “Quiero felicitar al PRO y a la Coalición Cívica por acompañarnos, a pesar de que sabemos que tuvieron presiones”, dijo. Hizo una mueca, como si tragase algo amargo, y agregó: “La jueza y el fallo que llevó adelante no tiene que ver con los valores que defendemos: la solidaridad, la transparencia y la libertad”. “Nos vamos a tomar el tiempo para estudiar el fallo y ver qué hacemos al respecto”, dejó en aire. Y se retiró. Macri estuvo reunido toda la tarde con Michetti, el jefe de Gabinete Horacio Rodríguez Larreta y el secretario general Marcos Peña analizando el fallo. Las opciones no se limitan sólo a una apelación. También hubo quien consideró, como el legislador Martín Borrelli, que podría corresponder pedir un juicio político.