En medio de la profunda crisis económica que vive el país, y de manera particular el mundo de la televisión, Canal 13 decidió salir a la cancha con los tapones de punta. En un hecho poco frecuente para la lógica televisiva, el canal de Constitución decidió lanzar en pleno verano a una de sus principales apuestas para 2002, en lugar de hacerlo en marzo, mes en el que tradicionalmente comienza la temporada alta de la TV nacional. “Son amores”, la nueva telenovela diaria producida por Pol-Ka, comenzará a emitirse el próximo lunes a las 21. El ciclo, que indaga en tono de comedia romántica la vida de un árbitro de fútbol, estará protagonizado por Miguel Angel Rodríguez, marcando el debut del ex imitador de “El show de Videomatch” como figura estelar de una telenovela.
Rodríguez interpretará a Roberto Sánchez, un referí de fútbol de primera división que, debido a su rigurosidad a la hora de aplicar el reglamento, cosecha entre los futbolistas, hinchas y dirigentes igual cantidad de elogios como de críticas. Lo que se dice un árbitro polémico. “Para componer el personaje –explica el protagonista–, tuve que bajar como 10 kilos y charlar con algunos árbitros, como Héctor Baldassi y Luis Olivetto (ya retirado), para que me den algunos consejos. Si bien el personaje está delineado en el particular estilo que tenía Javier Castrilli, porque es un tipo amante de cada letra del reglamento, en realidad me inspiré en lo que me dijeron Baldassi y Olivetto”.
Autoproclamado como un “tipo honesto y rígido”, Sánchez deberá lidiar fuera del campo de juego con varios amores. Recientemente abandonado por su pareja, su vida dará un rápido vuelco cuando inesperadamente lleguen de un pueblo del interior dos sobrinos (Nicolás Cabré y Mariano Martínez), con la idea de probar suerte como futbolistas jugando en la primera del club All Boys. Viviendo en el hogar de Sánchez, las locuras de Martín y Pablo Marquesi trastocarán la apacible y estricta vida que llevaba su tío, más apegado a la tranquilidad del hogar que a la agitada vida de sus nuevos compañeros de techo. Más tarde también arribará Valeria, su otra sobrina, lo que volverá aún más caótica la convivencia.
Pero ése no será el único cambio que sufrirá la vida de Sánchez. La aparición en su camino de Lola (Millie Stegmann), una partera un tanto ingenua, será el otro eje por el que transitará “Son amores”. Enamorado a primera vista de Lola, Sánchez descubrirá que la mujer en cuestión es justamente la esposa de su principal enemigo, Guillermo Carmona (Mario Pasik), que complicará su relación. Amigo de los negocios sucios, Carmona es un ex árbitro que dirige a una de las principales asociaciones de árbitros del país. Como Sánchez no está dispuesto a transar con Carmona, el dirigente tiene la firme intención de hundirlo, utilizando para ello cualquier tipo de arma. La disputa, por el arbitraje y por Lola, promete ser cruel entre los antagonistas personajes.
El elenco de “Son amores” se completa con Reina Reech, Laura Azcurra y Florencia Bertotti, y además contará con la actuación especial de Berugo Carámbula, que volverá a la actuación después de varios años dedicados a la animación. “Mi personaje se llamará Wilson, un uruguayo encargado del edificio donde vive Sánchez que, como todos los porteros, sabe lo que ocurre en cada uno de los departamentos. Será el compinche de Sánchez: lo ayuda, le trae chismes, sale con él y hasta lo acompaña a la cancha... Es un tipo muy pícaro, pero a la vez querible”, concluye un Carámbula sin bigote.
Si bien la telenovela conservará el tono de comedia costumbrista característico de las tiras televisivas de Pol-Ka, Rodríguez señala que “el tema de lo que ocurre con la Justicia en el país se va a percibir en cada programa. En principio desde el lado del arbitraje, de su funcionamiento, porque se verá una interna a muerte entre los corruptos y los tipos honestos. Aun siendo ficción, la telenovela no deja de remitirse a la realidad. Tanto Suar como los guionistas pensaron abordar el tema dela Justicia, y creo que se les ocurrió hacerlo enfocando su mirada al ámbito del arbitraje con el fin de que pueda ser más popular y entendible para todos”.
La novela marcará el primer cambio importante que realiza Suar en el horario prime time desde que asumió la gerencia de programación de Canal 13. Lejos de innovar demasiado –de hecho es inevitable la asociación de “Son amores” con “RRDT”, la tira que protagonizó años atrás Carlos Calvo-, el ciclo contendrá todas las características del sello Pol-Ka: gags cómicos, enredos amorosos, personajes barriales, etcétera. Con un panorama bastante oscuro para la TV en 2002, la lógica de Suar resulta sencilla, pero por lo visto hasta el momento en su faceta de productor de ficción (“Qué espectáculo”, su intento en otra área, fracasó estruendosamente), también efectiva: más de lo mismo, pero con una vuelta de tuerca. Por ese motivo no resulta extraño que el equipo que realiza “Son amores” sea un ciento por ciento Pol-Ka, a excepción de la incursión de actores como Rodríguez y Reech. Inclusive, los guiones están a cargo de dos viejos conocidos del clan Suar: Jorge Maestro y Ernesto Korovsky (“El sodero de mi vida”, “Gasoleros”, etcétera).
“El compromiso más grande en mi nueva función en el canal es mantener el estilo que Canal 13 tuvo durante toda su historia”, explicó Suar durante la presentación realizada en el Hotel Alvear. “Ojalá pueda también darle mi propio sello a la pantalla del 13. Espero que el país pueda mejorar, para que se sigan haciendo programas de ficción, periodísticos, de entretenimientos... Todo lo que la industria televisiva nacional está acostumbrada a dar, que sin lugar a duda ha sido en este último tiempo de muy alto nivel”.