Mié 22.01.2003

ESPECTáCULOS

Volvió Caviar, con sus delirantes damiselas en gloriosa sintonía

El legendario grupo teatral liderado por Jean–François Casanovas retornó a escena con dos shows desenfadados, plenos de brillos festivos.

› Por Cecilia Hopkins

Puntual desde hace años, el grupo Caviar, que lidera Jean-François Casanovas, acaba de producir su estreno anual. Como en su anterior Rábano, La Casona del Teatro (Corrientes 1975) ha sido el lugar elegido para la presentación de dos espectáculos de diferente formato, que pueden verse uno detrás de otro los viernes y sábados. A las 21, en el pequeño escenario del bar del teatro, los seis integrantes de Caviar ofrecen en Las Glicinas la velada artística de un improbable Club Social de los años ‘40. Se trata de un puñado de números que ilustran en pequeñas dosis el espíritu paródico del grupo, su estética retro y los recursos expresivos que lo definen. Idéntico a sí mismo, Caviar sigue incursionando en el transformismo y la fonomímica para dar forma a sketches basados en audios de películas, programas de radio y muestras de la publicidad de otros tiempos. Pero en esta instancia, la presentación de la orquesta Molto Vivace cede al momento musical un lugar preponderante, con Eduardo Solá a cargo del piano. La propuesta, sin embargo, podría sumar un atractivo mayor en caso de aprovechar la cercanía del público, especialmente en el momento del bingo.
Quienes se hayan quedado con ganas de más, luego de la sangría helada, a las 22.30, podrán ingresar a la sala. Escalera propone otra tanda de sketches en los que se observa un desarrollo mayor respecto de otras temporadas, en las que la sucesión de números resultaba tan vertiginosa y algunos cuadros, tan breves, que a veces parecían ideados solamente para lucir algún atuendo sorprendente. Con un vestuario notablemente renovado, entre pelucas, tocados y brillos festivos –y la feliz inclusión de Gabriela Diez en el elenco–, Caviar continúa en Escalera refundiendo épocas en modas y ritmos musicales, y sigue manteniendo en alto la mirada irónica sobre los personajes creados. El trío conformado por Marcelo Iglesias, Solá y el propio Casanovas ofrece el plato fuerte de sus damiselas en glamorosa sintonía, siempre que no intervengan los celos y suceda alguna pequeña venganza de escenario. En lo formal, el grupo vuelve a apostar al refinamiento y la elegancia como en sus anteriores shows concretados fuera del circuito under, en los que privilegiaba un humor algo más desenfadado. No obstante, de aquellas noches de Ave Porco se recicla el gracioso “Mercedes se está bañando” y el Ave María, que Casanovas anima transformándose en el ser andrógino que posa ante el público como una estatuilla art-déco.

(Versión para móviles / versión de escritorio)

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina
Versión para móviles / versión de escritorio | RSS rss
Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux