Fernando Andacht es profesor de Semiótica en la Universidad Católica de Uruguay y en la de Porto Alegre, Brasil. Comparte con otros colegas como el francés François Jost –autor de El ojo cámara– y el argentino Eliseo Verón –autor de Construir el acontecimiento, entre otros– el haber sido pioneros en encarar el estudio teórico del reality show, entendido como un género televisivo más o menos reciente. Casi sin distanciamiento temporal desde el nacimiento de su objeto, estos teóricos decidieron salir a interpretar lo nuevo con el riesgo del trabajo “en caliente” pero con el alto impacto de una inauguración. En su libro El reality show: una perspectiva analítica de la televisión, Andacht deconstruye el novedoso formato del encierro televisado para hallar algunas claves que organizan la narración: la iluminación de los bastidores o zonas traseras de la vida cotidiana, la reconversión del concepto de vida privada, las pequeñas revoluciones que se producen cuando un canal familiar decide insinuar el desnudo, el sexo, la violencia y el trauma infantil, allí mismo donde los nuevos héroes se bañan, duermen, comen y van al baño. Pero lo más renovador del abordaje de Andacht (y lo que sirve para sostener el análisis de la guerra como el más extremo de los realities) sea su afirmación de que la influencia del género no queda encerrada en sí misma, sino que modifica transversalmente (de modo paulatino, indirecto) la totalidad de la programación e introduce nuevas claves (conocer vidas privadas, polarizar entre bandos, extender la cobertura en continuado y familiarizar las muertes) también en el territorio de la información.