ESPECTáCULOS
› ALMODOVAR, KUSTURICA, WONG KAR-WAI, ASSAYAS Y... “SHREK 2”
Consagrados y sorpresas en La Croisette
La diversidad de géneros, estética y temática dominará el 57 Festival de Cannes, donde a partir del 12 de mayo se proyectarán 56 largometrajes, de los cuales dieciocho competirán por la Palma de Oro, entre ellos La niña santa, de Lucrecia Martel. El cineasta español Pedro Almodóvar abrirá el certamen fuera de competición con La mala educación, y será un reflejo de la creciente y “bella vitalidad” de la cinematografía de habla hispana, subrayaron los organizadores. América latina estará representada no sólo por el film de Martel, sino también por Diarios de motocicleta, del brasileño Waler Salles, inspirada en los años de juventud del Che Guevara.
Como en ediciones anteriores, Francia y Estados Unidos, aunque ahora sólo con tres filmes cada uno y no cuatro o cinco, predominarán en La Croisette, el tradicional bulevar marítimo de Cannes. Les siguen en la conquista por la Palma de Oro Corea del Sur, con dos films, Old Boy, de Park Chan-Wook, y La femme est l’avenir de l’homme, de Hong Sang-soo; y Japón, con otras dos, Nobody Knows, de Kore-Eda Hirokazu, e Innocence, animación de Oshii Mamoru. Procedentes también de Extremo Oriente se estrenarán Tropical Malady, del tailandés Apichatpong Weerasethakul, y 2046, del hongkonés Wong Kar-wai. Francia se hará presente con Exils, del cineasta gitano de origen argelino Tony Gatlif, que la rodó parcialmente en el sur de España; Clean, de Olivier Assayas, y Comme une image, de Agnes Jaoui. Las otras películas europeas en competición son Le conseguenze dell’amore, del italiano Paolo Sorrentino; Edukators, de Hans Weingartner, con quien Alemania vuelve a luchar por la Palma de Oro tras doce años de ausencia; The Life and Death of Peter Sellers, del británico Stephen Hopkins, y La vie est un miracle, del bosnio Emir Kusturica.
Desde Estados Unidos, Michael Moore llevará Fahrenheit 9/11, una visión sobre la vida en su país después de los atentados del 11 de septiembre de 2001, y los hermanos Coen, The Ladykillers. Tras el sonado éxito de Shrek, Andrew Adamson, Kelly Asbury y Conrad Vernon volverán a Cannes con la segunda parte de su célebre y entrañable ogro verde, protagonista de Shrek 2, una de las dos películas de animación –la otra es la japonesa Innocence– que aspiran a los grandes premios del festival. En el jurado, presidido por el estadounidense Quentin Tarantino, habrá tres compatriotas suyos: el escritor Edwidge Danticat, la actriz Kathleen Turner y el director Jerry Schatzberg, junto con la actriz francesa Emmanuelle Béart, la británica Tilda Swinton, el actor y guionista belga Benoit Poelwoorde, el crítico finlandés Peter Von Bagh y el director Tsui Hark, de Hong Kong.
La actriz Marisa Paredes, ex presidenta de la Academia española del Cine, presidirá otro de los jurados del festival, el de la Cinéfondation, destinado a impulsar la creación joven. Más allá de la competición, Francia presentará siete películas, tres de ellas en la sección Una Cierta Mirada, que tiene jurado propio, y otras dos películas latinoamericanas, Whisky, de los uruguayos Juan Pablo Rebella y Pablo Stoll (en coproducción con Argentina), y Crónicas, del ecuatoriano Sebastián Cordero.