Sucedió lo inimaginable, tras 17 años de concordia Pericos se fracturó. Semejante escenario, y de la forma como ocurrió, estaba latente en grupos como Soda o los Redondos, en los que las tensiones del ego se volcaron en sus protagonistas. De hecho, así pasó. Pero no en Pericos, donde la camaradería, por lo menos eso parecía, era la rienda que los tiraba hacia adelante. La sociedad entre banda y vocalista se acabó. Funcionando como organización horizontal y luego de la repartición de culpas, los músicos, con Juanchi en la voz, salieron inmediatamente a probarse en los festivales. La consigna era sobrevivir o morir en el intento. Hasta ahora le dieron vuelta a la adversidad. No obstante, sin un disco que los respalde. Mientras que Bahiano se mantuvo en la penumbra, hasta ahora.
Si bien el runrún de que estaba por editar un trabajo como solista ya era periódico de ayer, éste finalmente salió a la luz. Bh(+) se titula esta opera prima que cabe en el concepto de solista, aunque el otrora vocalista de Pericos advierte que no se trata de su lanzamiento como tal. Bahiano, que presentará hoy el cd en La Trastienda, explica: “En el disco hay mucha catarsis. Estaba saliendo de una situación complicada. En algún lugar tenía que dejar lo que me presionaba o me hacía sentir mal. Acá hay autocrítica, autobiografía, hay dolor, hay esperanza, hay de todo. Lo manejo por ese lado”.
Musicalmente, retoma la línea Pericos de sus discos Mystic Love y Desde Cero, donde las coordenadas jamaiquinas apuntaron hacia el pop y el rock. “No pretendo romper toda una comunicación que mantuve con lo musical durante tantos años. Mucho de lo que pasaba en Pericos pasaba por mí. Es un disco ecléctico porque tengo todas las posibilidades de plasmar cosas que me gustan. Por ejemplo, no llego a hacer un hip hop, sino una modulación de rap. Y el rocksteady tiene que ver con lo que estaba haciendo anteriormente. En Desde Cero ya estaba componiendo canciones y cantándolas. Ahora estoy explorando una veta más personal. Me pondría mal si no hubiera evolucionado.”
Pero, incluso, va más atrás. Bahiano consigue explayarse también hacia las cadencias de Pampas reggae y sus marcas en el raggamuffin. “Esa es la maquinaria que venía conmigo. La última vez que interpreté una canción así fue con Párate y mira. Quise volver a cantar en ese estilo y tener esa actividad musical que me parece buena.” Explora en la conjunción de reggae y soul e invitó a Vicentico –otro convidado del disco fue el bluesman Miguel Botafogo–. “No mires atrás es un tema de The Temptations, popularizado por los Stones, que se llama originalmente Don’t Look Back. En algún momento de la realización del disco le dije a Afo Verde, productor del álbum, que quería que Gaby viniera a grabar. Vicentico fue el que dio la idea de hacer ese tema. En cierta medida, creo que también a él le gustó cantarlo porque no sé si le habrá servido de catarsis para con los Cadillacs. Si fue así, entonces le vino como anillo al dedo.”
Justamente, Afo Verde, quien explotó el matiz de crooner latino de Vicentico en sus dos álbumes, estimuló al Bahiano a explorar la veta del pop latino en Bh(+). “En lo que coincidimos Vicentico y yo es en el productor. Respeto mucho su trabajo, pero esto es una continuidad de lo que venía haciendo antes. Voy a ir generando otro tipo de sonidos a futuro. Este es recién mi primer disco en solitario. Quiero dejar grabado para mediados del año que viene el segundo. Estoy viendo qué es lo que me pide el cuerpo.”
El primer disco en solitario de Bahiano aparece en medio de una importante avanzada del reggae nacional y su recital de hoy en La Trastienda sucederá en el medio de los dos Obras de Los Cafres, el primer grupo de reggae argentino que alcanza tal hazaña, y previo al show de Riddim en el ND/Ateneo. “Pericos masificó el reggae en la Argentina. No está tomada como una banda que sea puntual dentro del reggae porque salía de losmoldes de lo que es tradicionalmente el reggae jamaiquino o el reggae con conciencia. Estaba próximo al pop rock dentro de lo que es la estructura de la canción en el reggae. Es muy saludable que haya muchísimas bandas haciendo reggae. Lo que no estoy sintiendo que haya es originalidad, que creo que existe en otros países y en menor medida acá. Pero todo tiene su tiempo.” Su lectura del dancehall y el raggamuffin se convirtió en un cuño en el país. Ahora también probará con el reggaetón. “El reggaetón me gusta. Es más, estamos viendo la posibilidad de que Oyelo (el primer corte del disco) sea cantando por varios artistas de reggaetón. Me parece un género muy caliente, rítmico, animado y está bueno hacerlo. No por nada está teniendo auge."