Para alternar la producción teatral local con la de grupos independientes del interior, en Elkafka (Lambaré 866) se iniciará hoy el ciclo El país teatral en Buenos Aires. Cada programa concretará un muestreo del panorama del teatro joven de diferentes provincias, tomando una ciudad por año. Para esta primera edición (que se extenderá del 29 al 2 de julio) fue elegida la ciudad de Córdoba. “La idea de concentrar en unos pocos días la actividad de los artistas de teatro del interior en Buenos Aires –reflexiona Rubén Szuchmacher, director artístico de la sala– ayudará a estas teatralidades a tener un mayor reconocimiento y difusión de su labor. Las próximas ciudades serán Rosario y Mendoza. Creemos, de esta manera, ayudar a la expansión del teatro de todo el país”, concluye. El ciclo cuenta con el auspicio de la Agencia Córdoba Cultura, el Instituto Nacional del Teatro y la colaboración de Documenta/Escénicas.
Los grupos convocados son 8: Gonzalo Marull abrirá el ciclo con Le triple, hoy a las 20 (la obra transcurre en 2050, durante el enfrentamiento de la Iglesia Católica y la Iglesia Maradoniana), y a las 22 se presentará el Grupo Bacalao con Nada. Mañana a las 20 llega el Grupo Organización Q con su obra N9, de Luciano Delprato; a las 22 irá el Teatro minúsculo, escenas de creación instantánea en un bar. El viernes a las 21, el grupo NS/NC estrenará El ósculo del crepúsculo, de Ariel Dávila, y a las 23 será el turno del Grupo La Negra y A la mojiganga, de Natalia Alvarez y María Sol Pereyra, con “cuatro mujeres atravesadas por el psicoanálisis de bolsillo, la identidad nacional y la vida extraterrestre”. El sábado 2, a las 21 y a las 23, se presentarán Cero Punto Ellas, con Yesterdei (en torno a la memoria, la autobiografía y la sensación de soledad), y el grupo La Resaca, con Tres, con dirección de Marcelo Massa. Szuchmacher analiza el proyecto.
–Las teatralidades regionales, ¿son una forma de teatro que intenta independizarse de los modelos que genera Buenos Aires?
–Cada región busca su forma de expresión. Y de algún modo, intenta generar algún modelo alternativo al sistema dominante de la Capital. Aunque no todas las ciudades del interior tienen desarrollos parejos. En Córdoba es notable la tradición de María Escudero y sus discípulos, activos en la idea de la creación colectiva. Estos artistas intentan generar sus obras desde diferentes modelos, desde la dramaturgia del actor hasta el texto escrito en soledad.
–¿Cuáles fueron los criterios de selección de las obras?
–Los artistas convocados pertenecen a una misma generación, los más jóvenes. Dejamos afuera de la selección a artistas paradigmáticos como Paco Giménez o Cheté Cavagiatto, que ya tienen su espacio de consagración local y nacional.
–¿Cuáles son las temáticas que abordan las obras elegidas?
–Son diversas: mitologías urbanas cordobesas, la memoria autobiográfica, la lírica del ser nada o el absurdo visto por la mirada femenina.
–¿Es teatro de texto o habrá experiencias interdisciplinarias?
–Algunas obras son teatro de texto, como la de Gonzalo Marull o la de Ariel Dávila, y otras han sido trabajadas desde la interacción de los actores, autores y directores.