ESPECTáCULOS
“Mostramos diez minutos, como un acto simbólico”
Las realizadoras Mariana Arruti y María Pilotti presentarán en Rawson y Trelew una parte del documental en que vienen trabajando, al cumplirse mañana treinta años de la llamada Masacre de Trelew.
› Por Oscar Ranzani
La llamada Masacre de Trelew, de la que mañana se cumplen treinta años, marcó un punto de inflexión en la historia política argentina. Aquel día l6 miembros de tres organizaciones armadas –el Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP), las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR) y Montoneros-fueron fusilados mientras estaban arrestados en una unidad de la marina, durante la dictadura militar que encabezaba Alejandro Agustín Lanusse. Esos l6 militantes se habían rendido pocos días antes, al no haber podido abordar un avión en el que se fugaron seis de sus jefes políticos. La masacre que siguió al hecho que la historia llamó La Fuga de Trelew, es considerada hoy como una especie de antesala del reinado del terrorismo de Estado durante la dictadura militar 1976-1983.
Desveladas por aquella historia las directoras Mariana Arruti y María Pilotti realizaron el documental Trelew, pensando en estrenarlo mañana, para el 30 aniversario. No llegaron, pero no se quedarán con las ganas: exhibirán l0 minutos mañana en el cine Coliseo de Trelew y el viernes en el Centro Cultural José Hernández de Rawson. “El objetivo de llevar este fragmento es poder estar presentes en el lugar de la tragedia. Ya que no llegamos a terminar la película decidimos hacer un acto simbólico presentando este avance”, cuenta Arruti. “Mientras tanto seguimos trabajando con la posproducción de la película y esperamos tener apoyo para concluirla definitivamente”, agregó la realizadora.
Trelew fue producida por la Fundación Alumbrar y contiene material de archivo, documentos y testimonios de personas que fueron protagonistas de los hechos. Entre los entrevistados figuran Enrique Gorriarán Merlo (ERP) y Fernando Vaca Narvaja (Montoneros) quienes lograron arribar al aeropuerto de Trelew y abordar el avión hacia Chile antes de la llegada de los miembros de la Armada. Otros testimoniados son Silvia Hodgers, Alicia Sanguinetti, Pedro Cazes Camarero y Celedonio Carrizo, cuatro militantes que se quedaron en el penal. El documental también cuenta con las opiniones de Eduardo Luis Duhalde y Rodolfo Mattarollo, ambos abogados de presos políticos. Hay entrevistas muy curiosas a guardiacárceles, taxistas que llevaron a algunos miembros de las organizaciones armadas, un médico que revisó a los prófugos y personajes que estuvieron en la base Almirante Zar, donde fusilaron a los guerrilleros.
–A 30 años de la masacre, ¿qué mirada tiene su documental?
–De alguna manera la película se hizo para interrogarse sobre un hecho que fue premonitorio de lo que fue después el terrorismo de Estado en la Argentina. Es un momento en el cual aparece una decisión de matar, de eliminar físicamente que es algo que, luego en la época del Proceso se va a reforzar como tendencia. De alguna manera el Estado toma una decisión (decide matar) pero al mismo tiempo no se hace cargo de esta decisión.
–Existen numerosos hechos políticos trágicos, ¿por qué le interesó contar la historia de Trelew?
–Trelew es un símbolo de lo que vino después. Mi generación (yo tengo 33 años) está caminando sobre los escombros de un país y de algún modo mirar para atrás hechos a lo mejor nos ayuda a preguntarnos, a entender, a discutir, a pensar por qué estamos como estamos. Además es una historia muy particular y muy fascinante.
–¿Cómo encontró a sus pobladores en la actualidad? ¿Tienen miedo a hablar?
–Para Trelew y Rawson sigue siendo una historia muy fuerte y muy presente. Nosotros hemos dado cuenta de que toda la gente que ha querido participar lo ha hecho por una necesidad interna y por un compromiso muy fuerte con su propia historia y la historia del país. Pero los temores no están ausentes.