–¿Qué perspectivas tiene sobre el futuro, hoy?
–No tengo perspectivas claras. Esencialmente soy un hombre optimista, aunque no siempre lo parezca. Creo que estamos viviendo una crisis histórica mundial, no sólo argentina, de la que va a ser muy difícil salir. Probablemente sea uno de los momentos más graves de la humanidad. La crisis excede lo económico y es a futuro. ¿Qué va a pasar con el planeta entero si se agranda el agujero de ozono, por ejemplo, que impide la fotosíntesis? ¿Qué va a ocurrir con un mundo que se reproduce a una velocidad mucho más grande que su capacidad de alimentación? La peste negra de Londres, o las guerras mundiales fueron fenómenos localizados. El sida, en cambio, es una peste universal, y avanza a una velocidad asombrosa. Y la perspectiva de una guerra nuclear no está tan lejana, con lo que está pasando en Medio Oriente. Puede sonar apocalíptico, pero nunca se han dejado de usar las armas que se inventaron. Uno solo de esos elementos bastaría para poner en riesgo a toda la humanidad: ¿qué pasa cuando concurren cuatro o cinco? Además de todo eso hay un problema metafísico gravísimo, porque estamos viviendo en un universo que se volvió incomprensible.
–¿Y en cuanto a la Argentina, específicamente?
–La única perspectiva que puedo dar es pesi-optimista, y casi con sentido del humor: estamos tan mal que no tenemos casi posibilidad de que la cosa no mejore. Porque dentro de un año para abajo no se va a poder ir. O desaparecemos totalmente o se ha encontrado una solución. Pero un escritor no es un hombre que da soluciones, como un filósofo no es un hombre que de respuestas. Como decía Pascal, a veces es tan importante plantear bien una pregunta como dar una respuesta. El asunto es plantear las preguntas bien. Probablemente estemos pasando por un momento en el que tengamos que reformular las preguntas, ponerlas en el lugar que corresponde. Y desde ahí preguntarnos quiénes somos, qué queremos, qué es ser argentinos, qué es intelectual, qué es un periodista, qué es un hombre comprometido, qué es la literatura, para qué sirve escribir.