Vie 30.01.2004

ESPECTáCULOS • SUBNOTA

Una vieja llena de gatos

Borges la consideraba una de las mejores escritoras de teatro. Elena Garro nació en Puebla en 1920. Su novela Los recuerdos del porvenir (1963, Premio Xavier Villaurrutia) se teje en torno de un episodio de la Guerra Cristera (1926-1929). Esta narración rompió con violencia la continuidad del realismo mexicano al manejar el tema del poder desde un ángulo político y fantástico a la vez. En otra de sus novelas, Andamos huyendo Lola (1980), intensifica el clima de persecución, en el que aparece, de manera obsesiva y biográfica, la figura de su hija Helena Paz. Su obra teatral Felipe Angeles (1979) dramatiza un suceso de la Revolución Mexicana poco analizado, centrado en la figura de ese revolucionario que la historia priísta había olvidado. En 1937, Garro se casó con el poeta Octavio Paz, del que se separó a principios del ‘60. En la década del ‘70, se fue de México porque los gobiernos de Díaz Ordaz y de Luis Echeverría aseguraban que Garro había estado involucrada en el Movimiento Estudiantil del ‘68. Vivió en Nueva York hasta 1974, año en que viajó a Europa para permanecer en España y después en Francia.
A su regreso del exilio se instaló en Cuernavaca, en donde vivía humildemente en un modesto departamento junto con su hija y 14 gatos. Calificada de “vieja amargada llena de gatos”, Elena arrastró consigo sus espectros a todas partes, sin pertenecer a ningún lugar. Al respecto señaló: “Yo creo que el exilio es malo. No entras a cualquier exilio con facilidad, siempre eres una persona al margen. Si no tienes país, eres un marginado”. Elena odiaba a las instituciones, prefería a los indígenas explotados y desprotegidos. Incomprendida, según Garro por sus opiniones políticas, ayudaba a los campesinos por considerarlos gente igual a ella. En 1996 publicó la novela Un corazón en un bote de basura. Murió a los 77 años, el 23 de agosto de 1998, tan sola e incomprendida como muchos de sus personajes. “He llegado a pensar que ya no tengo nada que decir; ya lo que tenía que decir lo dije en su momento y no sirvió más que para sentirme vacía”, dijo poco antes de morir.

Nota madre

Subnotas

(Versión para móviles / versión de escritorio)

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina
Versión para móviles / versión de escritorio | RSS rss
Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux