SOCIEDAD
Otra buena del vino
Además de las vitaminas que aporta y su ya conocido efecto preventivo contra las enfermedades cardíacas, el consumo moderado de vino también puede ayudar a prevenir la demencia senil, según ha descubierto un grupo de científicos daneses. Un estudio publicado en el número de noviembre de la revista Neurology, de la Academia de Neurología de Estados Unidos, afirma que las personas que beben vino, blanco o tinto, tienen dos veces menos probabilidades de desarrollar esa enfermedad, incluyendo el mal de Alzheimer. “Es así y está probado desde hace años, pero esto no significa que deba aumentarse el consumo porque el efecto de destrucción neuronal del alcohol puede enmascarar los beneficios que aportan los antioxidantes que contiene el vino”, explicó a Página/12 el titular de Neurología de la UBA, Roberto Sica.