“En la práctica las parejas heterosexuales pueden decidir entre contraer matrimonio o unirse de hecho. En cambio, las parejas homosexuales sólo pueden convivir pero sin gozar de ningún tipo de protección legal con la consiguiente desigualdad de derechos que ello conlleva.” La argumentación pertenece al recurso presentado ante la Corte Suprema de Justicia de la Nación por la gobernadora de Tierra del Fuego, Fabiana Ríos, en favor de los casamientos entre personas del mismo sexo. Bajo la figura jurídica Amicus Curiae (Amigos del Tribunal) –donde se tienen en cuenta distintas opiniones en las causas con alto grado de importancia social– el documento advirtió que es “discriminatorio” limitar ese vínculo conyugal sólo a los heterosexuales y, además, viola la igualdad de derechos entre las personas, consagrados en la Constitución nacional.

“Todas las personas deben poder elegir si se casan o no, tiene que ser una elección y no una imposibilidad. De otra forma, estaríamos estableciendo una distinción entre ciudadanos de primera y ciudadanos de segunda jerarquía”, explicó a Página/12 el diputado fueguino (Bloque ARI) Leonardo Gorbach. La semana pasada, Gorbach, junto a su compañera de cámara Nélida Belous (SI) y la senadora María Rosa Díaz (ARI) acompañaron la presentación de la gobernadora Ríos.

La propuesta fue redactada por la Federación Argentina de Lesbianas, Gays, Bisexuales y Trans (Falgbt) en el marco de una causa originada en febrero 2007. Se trata del caso de María Rachid y Claudia Castro que se presentaron en el Registro Civil para casarse, pero se les rechazó la solicitud porque el Código Civil (en su artículo 172) establece como “indispensable” que el casamiento sea entre un hombre y una mujer. La pareja llevó el caso a la Justicia, pero la demanda fue rechazada en primera y segunda instancia, y ahora el caso llegó a la Corte Suprema.

El recurso de Ríos y los legisladores de Tierra del Fuego es al menos la quinta presentación que como Amigos del Tribunal ha recibido la causa. En el texto, se denunció que “en Argentina conviven diversas formas de discriminación” y que la negación de derechos “en muchas oportunidades proviene del propio Estado, que debiera ser el garante final de la igualdad de acceso a las oportunidades y el pleno goce de la ciudadanía”.

La presentación destaca que para la Constitución, todos los “habitantes son iguales ante la ley” y que los tratados internacionales incorporados a la Carta Magna hablan del “libre consentimiento expresado por los contrayentes”. En definitiva, “entendemos que las personas tienen que ser libres de elegir con quién formar una familia, para tener todos los ciudadanos los mismos derechos”, argumentó Gorbach.

Informe: Mariana Seghezzo.