Tras varias semanas de rumores sobre un supuesto e inminente cambio de hora, el gobierno nacional aclaró ayer que por el momento no habrá modificaciones del huso horario para ahorrar energía durante el verano. Esta decisión, según dijo el ministro de Planificación Federal, Julio De Vido, se debe a que a diferencia de los últimos dos años, ahora existe una mayor “oferta en la generación de electricidad” y las centrales hidroeléctricas tienen “alta disponibilidad de agua”. El Gobierno también tuvo en cuenta el anunciado rechazo de varias provincias, principalmente Córdoba y Santa Fe, para sumarse a la medida. El cambio, sin embargo, alcanzará a las computadoras que usen sistemas operativos de Microsoft, que ya habilitó una página para reparar el error.

La fecha que se estipuló en los medios de comunicación para el cambio era mañana, tercer domingo de octubre, tal como sucedió el año pasado. En verdad, la Ley 26.350, vigente desde 2007, no obliga al Gobierno a realizar esta modificación, sólo la posibilita a través de decretos en casos de que resulte conveniente implementarla. Sin embargo el debate se acrecentó al punto de que las autoridades sanfesinas y cordobesas anunciaron que no se plegarían a adelantar la hora.

Ayer se terminó el silencio oficial, cuando De Vido aseguró: “El ministerio a mi cargo ha asesorado a la Presidenta, quien ha dispuesto por el momento no realizar ningún tipo de corrimiento de huso horario, salvo que la situación más adelante lo amerite”. El funcionario explicó que modificar el horario, como se hizo el verano pasado entre el tercer domingo de octubre y el tercero de marzo, sería “inconducente” porque las circunstancias no hacen prever una crisis energética.

Para sostener esa decisión, el ministro enumeró una serie de elementos que permitirían suponer que este año no sería necesario el cambio. La primera cuestión es la oferta energética. Las cuatro centrales hidroeléctricas del país “están con alta disponibilidad de agua”, aseguró De Vido. Actualmente, agregó, “hay un 13 por ciento más de oferta en la generación de electricidad (2020 megavatios) que hace dos años y aumentó 15 por ciento la capacidad de transporte en alta tensión, contra un aumento de la demanda energética de dos por ciento en el mismo período”.

Este último dato evidencia una menor actividad industrial local durante 2009 que incide en la baja demanda y que está motivada por la crisis internacional. La modificación del huso horario fue implementada desde 2007 con el fin de aprovechar la luz natural durante los meses del verano (en los que abundan los cortes) y reducir la demanda de electricidad ante una oferta muy limitada.

“El 18 de octubre no va a pasar nada, porque además nosotros nunca dijimos que iba a ocurrir nada, fue una medida instalada por algunos sectores mediáticos”, dijo el ministro, en referencia a los rumores diseminados entre la población de todo el país. De hecho, más allá de la usual reticencia de las autoridades de las provincias del oeste, en Santa Fe y Córdoba también se adelantó que de proponerse el cambio este año sería rechazado. Lo cierto es que sólo Microsoft, por un protocolo regional, adelantará la hora en todos sus sistemas operativos hoy a las 24. Para poner el reloj en orden, la empresa dispuso de instrucciones, para antes y después del cambio en www.microsoft.com/argentina/dst/.

“Los gobernadores que salieron a decir que no adelantaran la hora sobre una hipótesis mediática, calculo que tendrán debidamente garantizado su sistema de distribución”, dijo De Vido, en alusión a los dichos de los gobernadores de la zona de Cuyo y el norte del país, que aseguran que el cambio no les generaba réditos. También pusieron el grito en el cielo los empresarios ligados a la industria del turismo, que transmitieron su malestar al gobernador Daniel Scioli el jueves pasado en Mar del Plata. “No se va a hacer nada que dañe la industria”, les aseguró el gobernador. Aunque De Vido reconoció que el tema fue considerado este año por Cristina Fernández, en el marco de la política de uso racional del sistema eléctrico encarada por el gobierno nacional, nunca se tomó la decisión de aplicarlo. El funcionario argumentó su anuncio mencionando una evaluación técnica del parque generador térmico, hidroeléctrico y del sistema de transporte en alta tensión, que indica que por “las condiciones en las que se encuentra, no se necesitaría por el momento ningún tipo de cambio”.