Valeria y su esposo buscan hace años ser papás y no lo consiguen. Ante la imposibilidad de concretar una adopción en la Argentina, buscaron otras alternativas y las puertas se abrieron en Haití. Ellos iniciaron los trámites y hace poco tiempo pudieron concretar el sueño de ser padres: adoptaron a Mario, un niño haitiano de seis meses. La asignación del pequeño a la familia ocurrió antes de que se produjera el brutal sismo del 12 de enero, que dejó al país caribeño bajo los escombros. A fines de diciembre, Valeria pudo viajar con su hermana Evelina a conocer a Mario, pero debió regresar a la Argentina, justo en el último avión comercial que despegó de Haití antes del terremoto. “Ante la desesperante situación que se vive hoy en ese país”, Valeria, como otras trece familias argentinas que ya tenían los trámites de adopción avanzados y sus niños haitianos asignados, exige el permiso de las autoridades de ambas naciones para que esos chicos puedan venir al país con sus padres adoptivos. “Nosotros queremos salvar la vida de nuestros niños hoy, porque están en un riesgo latente”, destacó la mujer. Otra de las mamás apunta: “Ellos ya tienen a sus papás”.

“Nosotros necesitamos que el gobierno argentino requiera al gobierno haitiano un permiso para que esos niños, que estaban en un proceso de adopción, con asignaciones anteriores al terremoto, puedan venir por esas circunstancias a la Argentina con sus padres adoptivos”, explicaron las familias en una entrevista de Página/12. Para que ello suceda, “el Gobierno debe autorizar al cónsul argentino en Haití para que gestione el permiso ante las autoridades haitianas”, aclaró Valeria.

En ese sentido, Nora, otra de las mamás adoptivas, agregó: “Todo trámite quedó trunco, se hundió con el terremoto”. Lo que piden, entonces, es traer a los niños y “continuar el proceso de adopción aquí, con una guardia pre-adoptiva. Someternos nuevamente a todos los informes, visitas y requerimientos”.

Las familias argentinas que tienen los trámites encaminados para la adopción de niños haitianos son 14 y, los hijos de once de ellas pertenecen al orfanato Foyer de la Nouvelle Vie, que quedó en ruinas luego del sismo. El grupo de padres adoptivos se unió para hacer oír su llamado a la solidaridad. “Nuestros niños están de-samparados, a la intemperie, ya no comen como antes”, contaron las mamás. Según la información que les llega a través de la hermana de Valeria –quien se quedó en Haití para ayudar en el orfanato– muchos de los nenes han perdido peso, están tristes y muy asustados.

Dos de las familias ya tienen la sentencia de adopción y las demás cuentan con fotocopias de la documentación que presentó el orfanato, explicó Astrid, mamá adoptiva de Estiphen, un bebé haitiano de nueve meses. “Todos los que llegamos hasta acá, lo hicimos de la manera más humana y legal, sino no nos hubiéramos ido tan lejos para adoptar”, afirmó.

Si bien cada familia llegó a tramitar la adopción en Haití por caminos distintos, todas compartieron la idea de que en la Argentina se agotaban sus posibilidades. Astrid y su esposo iniciaron los trámites en marzo de 2009 y, aunque no están finalizados, hace tres meses pudieron hallar a Estiphen. A fin de año ella viajó para conocerlo y pudo estar con él hasta el 10 de enero, dos días antes del terremoto. “Sé que mi bebé está bien, aunque con algunas diarreas y vómitos por la falta de agua potable y comida.” Esa es una situación que aterroriza a todo el grupo de papás.

Las asignaciones formales ocurrieron antes del sismo. Esta es una aclaración que se encargaron de resaltar las familias. Además, incitaron a la Argentina a seguir los pasos de Estados Unidos, Francia y Holanda. Es que esos países se comprometieron a acelerar la llegada de los chicos haitianos que tenían sus adopciones iniciadas antes de la catástrofe.

“Hace mucho que quiero ser mamá y por una cuestión biológica no puedo. Necesito que me ayuden para poder estar cerca de mi bebé”, esbozó Astrid. “Nosotros queremos ser padres y sacar a esos chicos de la situación de pobreza extrema en la que viven. Estamos dispuestos a lo que sea”, aseguró Valeria. La idea quedó clara: ellas necesitan a esos chicos y ellos necesitan el amor, la contención y el cuidado de una familia.

Informe: Rocío Ilama.